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Ya las distancias geográficas del año pasado por compromisos laborales de ambos habían generado asperezas en la relación de Alejandro Fantino y Miram Lanzoni. "Acepten un consejo de un viejo lobo. Estar separado es ácido para una pareja. Evítenlo si pueden. Amen de cerca. Pero el amor triunfa", escribió Fantino en aquel momento. Pero a fines de julio el amor no fue suficiente y la crisis se agravó debido a otras razones que los dos prefirieron no hacer públicas. Sin embargo, siempre dejaron entrever el deseo de recomponer su vínculo y darse una nueva oportunidad. "A nadie le gusta estar lejos de la persona que ama ni atravesar un impasse. Pero fue inevitable la separación, hay que atravesarla como lo haría cualquiera. Sólo puedo decir que Miriam es la mujer de mi vida. Y el tema de la búsqueda de un hijo desgastó pero no fue determinante en esta crisis", confesó el periodista el lunes 8, al mediodía, antes de ingresar a radio La Red para hacer su programa. Allí Alejandro dejó ver en su mano el anillo de compromiso que aún lo une con la actriz y panelista de "Los Ángeles de la Mañana". Y lo mismo hizo Lanzoni, el viernes 5, en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, cuando también llevaba puesta su alianza, antes de viajar a Colombia. "Por decisión de los dos, ella se fue de la casa y se mudó para Capital. No es más que una crisis de pareja que ojalá podamos superar. Los motivos prefiero reservármelos. En estos momentos lo fundamental es respetar los espacios de cada uno, no invadirnos y dejar que las cosas decanten por sí solas. En cuanto a lo que siento, nada cambió. Por eso, voy a pelear por la relación", concluyó el conductor de "Animales Sueltos". Y sólo el tiempo escribirá el desenlace de esta historia.
Por Naiara Vecchio.
Fotos: Mauro Fonseca.
