Difícil es el momento que tiene que atravesar Máxima Zorreguieta y su familia. Acostumbrada a sonreír en su rol de Reina de los Países Bajos, la realidad le juega un duro pasar: su padre, Jorge Zorreguieta, de 89 años, se encuentra internado en estado de gravedad producto de su lucha contra la leucemia.
Máxima se vio obligada a abandonar el protocolo y viajar a la Argentina. Se dedicó full time a acompañar a su madre y a sus hermanos, así como también aprovechó al máximo las horas de su estadía para estar junto a su padre Coqui -como le dicen en la intimidad- sin despegarse de él.
A 11.446 kilómetros de distancia de su trono, la esposa de Guillermo de Holanda, salió de la clínica el lunes por la noche alrededor de las 21.30 hrs. Escoltada por su mamá, María del Carmen Cerrutti Carricar, se dirigieron junto a sus hermanos a cenar al restó Roux, ubicado cerca de la clínica Fundaleu, fundación que combate e investiga la leucemia, y donde Jorge está internado peleando por su vida.
Allí se distendieron y hablaron hasta la medianoche. Se pudo ver a la Reina sumamente tranquila aunque un poco decaída, previo a abandonar el lugar y subirse a un auto de alta gama con rumbo a Panamericana, protegida por dos custodios privados designados por la embajada holandesa y por tres efectivos locales.
En la mañana del martes, alrededor de las 6 AM, Zorreguieta se dirigió nuevamente a ver a su padre. Actualmente se encuentra en la clínica desde donde el médico, Miguel A. Pavlovsky, Director Médico Científico de la institución, emitió el siguiente parte médico: “El Sr Jorge Zorreguieta con diagnóstico de Linfoma no Hodgkin se encuentra internado en Fundaleu desde hace una semana cursando una infección pulmonar para recibir atención médica de enfermería y antibióticos endovenosos”.
A pesar del grado de hermetismo en relación al estado de Jorge, trascendió que su situación ha empeorado con el paso de las horas. Por este motivo Máxima se vio obligada a postergar su vuelta a Holanda.
Por Vicco García
Informe de Delfina Ortega Nodar