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Los opuesto se atraen, debe ser la premisa que llevan como estandarte la familia de Zaira Nara y Jakob von Plessen, al vivir vidas muy diferentes. Ella instalada en la gran Buenos Aires, triunfando como una de las conductoras top de las mañanas criando a su amada Malaika.
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Por su parte, Jakob , pasa gran parte de sus días en los increíbles parajes de la Patagonia rodeado de caballos y naturaleza en esplendor, disfrutando a su manera la vida, pero sin perder el contacto con la crianza de su pequeña de casi dos años.
Para no sentir las distancias y compartir tiempo en familia, el pasado fin de semana la modelos armó las valijas tomó a su hija y emprendió viaje hacia Neuquén, al encuentro de su amado.
“Papá, allá vamos”, comentó Zaira en la primera foto del viaje que compartió en su cuenta activa de Instagram. Pero la premisa familiar por el amor a la naturaleza, que en un principio el barón Von Plessen transmitió su pasión por los caballos a su hijo, y Jakob hizo lo propio con su pequeña, mientras que la morocha captaba cada momento, como lo de Mali cabalgando, guidada por su papá.
