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En la dulce espera, Amalia Granata aprovechó para compartir su tip más valioso durante el embarazo de Roque, su futuro segundo hijo: se olvidó de la dieta y decidió escuchar a su bebé.
Si bien aumentó 11 kilos, lejos de preocuparse por su figura (y vale aclarar que se la ve espléndida) la periodista optó por relajarse y comer lo que su cuerpo le pide.
“Escucho lo que el cuerpo me dice porque es lo que el bebé esta pidiendo para desarrollarse bien” afirmó la futura mamá en plena producción para CARAS.
La llegada inminente de Roque promete traerle a la rosarina un futuro lleno de amor, luego del tormentoso caos mediático en el que se vio envuelta junto a su pareja Leonardo Squarzón, quien le fue infiel. Dejando atrás ese episodio, Amalia Granata asegura: “No nos equivocamos al ponerle Roque, que significa fuerte como una roca. Pienso que será un bebé con mucha garra y me gustaría que heredera mi fuerza”.
Ya en el séptimo mes de embarazo, Granata cuenta que su hija mayor, Uma Fabbiani, está contenta y celosa a la vez con la llegada de Roque, pero que cuando se enteró que era un varón dijo: “Menos mal mamá porque la única reina de la casa soy yo.”
Consolidados como familia, junto a su hija y a su pareja, Amalia Granata festejó el baby shower de Roque con un círculo íntimo, entre los que se encontraban Guillermo Coppola y su amigo, el diseñador Facundo Wendler, quienes serán los futuros padrinos del bebé. Yanina y Diego Latorre se sumaron a la lista de invitados en la que también estaba Marcelo Polino, y la periodista Débora D'Amato entre otros.
