Así es la casa de Sol Pérez y Guido Mazzoni: a las afueras de la ciudad y un jardín imponente

Sol Pérez encontró a las afueras de la ciudad el escenario ideal para compartir su presente junto a Guido Mazzoni. En una casa que se distingue por sus detalles arquitectónicos y su jardín de gran extensión, la modelo argentina abre las puertas a un estilo de vida que prioriza la tranquilidad y el disfrute cotidiano.

La increíble propiedad en la que vive Sol Pérez a las afueras de la ciudad

Sol Pérez dio un giro a su rutina al instalarse junto a Guido Mazzoni en una casa que combina modernidad, naturaleza y confort. Alejada del ritmo urbano, la propiedad construida a medida refleja una etapa de equilibrio entre vida profesional, descanso y familia. Con líneas limpias, espacios amplios y un entorno verde que cobra protagonismo.

Ubicada en un exclusivo barrio privado en la zona norte del Gran Buenos Aires, el hogar que comparten desde hace varios años se convirtió en un refugio alejado del ruido de la ciudad, rodeado de vegetación y con espacios pensados para disfrutar. Con un estilo moderno de líneas limpias y fachada sobria, se destaca por su diseño funcional y elegante.

El exterior de la propiedad de Sol Pérez combina tonos neutros con grandes ventanales que permiten una conexión directa con el entorno natural. La luz es protagonista en cada rincón, y el verde que rodea la casa se cuela por cada abertura, generando una atmósfera de calma y amplitud.

Uno de los espacios más impactantes es el jardín, amplio y perfectamente cuidado, que se extiende detrás de la casa. Allí se encuentra una pileta de grandes dimensiones, que se convirtió en uno de los rincones favoritos de la pareja. Durante el verano, es habitual ver a la modelo disfrutando del sol en las reposeras que rodean la piscina, o compartiendo momentos con su esposo y su hijo Marco.

En el interior, la casa mantiene una estética cálida y contemporánea; el comedor combina muebles de madera con tapizados en tonos beige, generando una armonía visual que se replica en otros ambientes. En la misma línea, la cocina, uno de los espacios más compartidos por la pareja, cuenta con una isla central de granito, estanterías abiertas y electrodomésticos de última generación.

Por otro lado, el living está pensado para el descanso, con sillones amplios, texturas suaves y una paleta de colores neutros, se convierte en el corazón de la casa durante los fines de semana. Allí también se encuentra una hamaca colgante, uno de los objetos decorativos preferidos de Sol Pérez, que era parte de su antiguo departamento y que encontró un espacio en su hogar.

La propiedad también cuenta con espacios privados que reflejan la personalidad de cada uno. Desde un vestidor amplio y organizado, hasta rincones de lectura y relax, todo está pensado para que la vida cotidiana fluya con comodidad. La pareja supo equilibrar lo estético con lo funcional, y eso se nota en cada detalle.

La casa que Sol Pérez y Guido Mazzoni eligieron a las afueras de la ciudad refleja un estilo de vida que prioriza el bienestar, la privacidad y el contacto con la naturaleza. Con un jardín imponente como protagonista y ambientes diseñados para el disfrute cotidiano, la propiedad se convirtió en el escenario perfecto para esta nueva etapa familiar.

VDV