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Luciana, ¿qué te inspiró a convertirte en coach y cómo ha sido tu trayectoria hasta ahora?
Comencé mi camino hacia el desarrollo personal impulsada por una profunda reflexión sobre mi propia vida. Al igual que muchos, atravesé momentos de dolor y sufrimiento. Sin embargo, gracias a la búsqueda constante y a la esperanza de una vida mejor, pude superar estos desafíos y descubrir una fuerza interior que desconocía.
El coaching fue lo que le dio sentido a tantos años de búsqueda y me llevó a comprender que, si yo había podido cambiar mi vida a pesar de las circunstancias, podía ser una posibilidad en la vida de alguien más, un puente de conexión hacia su bienestar.
En cuanto a mi trayectoria, en mis inicios realizaba solo sesiones individuales, también llamadas coaching life o 1:1.
Mientras continuaba mi especialización en liderazgo y buscaba mi pasión, me identifiqué profundamente con la idea de Humberto Maturana: “Todos nacemos con una capacidad innata para amar y conectar, pero con el tiempo podemos olvidarnos de nuestra verdadera naturaleza.” Esto me llevó a hacer un postítulo en coaching de parejas, donde descubrí que entre el amor idealizado que nos muestran y el amor auténtico existe un abismo, y que para volver a conectar con un amor genuino, debemos desaprender los mitos y fantasías que hemos internalizado y reconstruir nuestra comprensión de las relaciones.
Mi trabajo como staff de distintos centros de enseñanza de coaching hizo que, tiempo después, comenzaran a llamarme de diversas instituciones y empresas, ya que muchas de ellas se están adaptando a los tiempos actuales eligiendo modelos de liderazgo más participativos. Decidí entonces aportar mi conocimiento y experiencia a través de cursos en habilidades blandas.
Al capacitar equipos en liderazgo, he podido contribuir a la creación de entornos laborales más saludables y productivos.
El trabajo en equipo y la empatía no solo benefician al grupo, sino que también empoderan a cada individuo. Al fin y al cabo, si damos lo mejor de nosotros mismos, inevitablemente contribuiremos a un entorno más positivo.
Incluso he tenido la oportunidad de ser convocada para dar charlas en otros ámbitos de la vida cotidiana; a muchas personas les interesa tener interacciones saludables. En una despedida de soltera, por ejemplo, hablé de cómo construir un excelente vínculo desde el inicio.
Las relaciones interpersonales, especialmente aquellas que establecemos entre adultos, son un motor fundamental en nuestro desarrollo personal. Cada interacción, positiva o negativa, nos brinda valiosas lecciones que nos ayudan a crecer y evolucionar.
Según tu experiencia, ¿cuáles son los principales desafíos que enfrentan las personas que buscan mejorar su bienestar emocional y personal?
Uno de los mayores desafíos que encuentro en mi práctica es la resistencia al cambio.
Muchas personas se aferran a patrones conocidos, aunque sean dolorosos y no les otorguen ningún beneficio, lo hacen principalmente por miedo a lo desconocido y a la incertidumbre del futuro.
La baja autoestima y las creencias limitantes también juegan un papel importante, dificultando la toma de acción. A esto se suman los desafíos externos: la sociedad, con sus expectativas y presiones; las exigencias laborales; las relaciones tóxicas, y la sobrecarga de información en redes, que puede generar confusión y parálisis.
Sin embargo, es importante recordar que el bienestar es un proceso, no un destino.
Con paciencia, constancia y las herramientas adecuadas, es posible superar estos obstáculos y construir una vida de bienestar y plenitud.
La clave está en dar el primer paso y creer en tu capacidad para lograr el cambio. Acompañado de un guía adecuado, este camino se vuelve más claro y seguro.
Has trabajado con diversas técnicas de coaching. ¿Cuál consideras que ha tenido un mayor impacto en tus consultantes y por qué?
Mi experiencia como coach me ha demostrado que un enfoque integral es la clave para lograr transformaciones duraderas.
En las sesiones individuales, comenzamos por definir con claridad el objetivo que el cliente desea alcanzar. Es como trazar un mapa hacia el futuro que queremos construir. A lo largo de la sesión, exploramos juntos los pensamientos, emociones y creencias que guían sus acciones. Es como desentrañar un rompecabezas para entender por qué las cosas son como son y qué es lo que está realmente a su alcance modificar.
Sin embargo, reconozco que muchas personas llegan a mis sesiones sin ninguna base en su desarrollo personal. Para ellos, recomiendo mis cursos y talleres, especialmente el de liderazgo personal. En este curso, trabajamos en fortalecer la autoestima, la comunicación asertiva y la gestión emocional. Son habilidades fundamentales que nos permiten relacionarnos de manera más sana con nosotros mismos y con los demás.
La salud mental es un tema crucial hoy en día. ¿Qué tres consejos prácticos ofrecerías a quienes buscan encontrar un equilibrio en sus vidas?
Encontrar el equilibrio en la vida diaria es un objetivo que muchas personas buscan. Desde el coaching, como herramienta de desarrollo personal, te propongo tres acciones clave:
- Enfócate en conocerte más: Nadie puede cambiar aquello que no conoce. Comienza por tomarte un tiempo para reflexionar sobre quién eres, qué te gusta y qué no, cuáles son tus valores y tus prioridades. Conéctate con tus emociones y aprende a identificar los patrones de pensamiento que te limitan. Escucha tu cuerpo y tu intuición; si te dicen que ahí no es, ahí no es.
- Conecta con tus necesidades y deseos: A menudo, descuidamos nuestras propias necesidades en favor de las de los demás. Es importante que aprendas a reconocer lo que necesitas para sentirte bien y satisfecho. ¿Qué te hace feliz? ¿Qué te da energía? ¿Qué te relaja? Una vez que hayas identificado tus necesidades, comunícalas de manera clara y asertiva a las personas que te rodean.
- Haz uso de los límites, incluso cuando se trate de amor: El amor no significa renunciar a ti mismo o permitir que otros abusen de ti. Establece límites claros y saludables en todas tus relaciones, tanto personales como profesionales. Aprender a decir “no” no es una señal de debilidad, sino de fortaleza.
Mirando hacia el futuro, ¿cuáles son tus metas y proyectos en el coaching que te entusiasman más en este momento?
Mi meta a corto plazo es ser una referente en mi profesión, llevando el coaching a enfocarse en la esencia intrínseca de las personas, que es el amor, el cual engloba el respeto, la confianza y la lealtad hacia sus pares. Aunque nos veamos diferentes por fuera, en el fondo somos iguales.
Mi proyecto a futuro es crear una escuela de coaching online accesible a todos, que no solo apunte a la formación de profesionales, sino que tenga un enfoque al público en general, donde pueda asistir quien lo necesite, más allá de su formación, y adquirir habilidades fundamentales para aplicarlas en todos los ámbitos de su vida. Por eso, el primer curso que armé es “Atrévete a Ser Tú”, un curso que apunta al conocimiento personal y al cambio interno necesario para desarrollar una autoestima sana. Mi aspiración es generar una comunidad global de individuos que inspiren a otros a descubrir su verdadero potencial y a construir relaciones más sanas y felices.
El trabajar actualmente de manera online con personas de otras culturas me ha enseñado que todos buscamos lo mismo: una vida plena y significativa.
Hoy puedo decir que vivir de la mano del coaching, siendo íntegra con mis valores y principios, ha superado todas mis expectativas. Vivo feliz, amo mi vida, me rodeo de gente maravillosa y no lo cambiaría por nada del mundo.
Si estás buscando un cambio en tu vida, te invito a que te unas a mis redes. Ofrezco cursos, talleres y sesiones individuales y de pareja para ayudarte a descubrir tu verdadero potencial y a crear la vida que siempre has deseado. Allí comparto consejos y recursos para ayudarte en tu camino hacia el éxito.
PARA CONOCER MÁS:
Instagram: @luciana.ellemberger.coaching
Whatsapp: +54 9 3515 05-1684
Web: https://lucianaellembergercoach.wordpress.com/
