Así es la vida de Julia, la esposa de Luciano Pereyra: pasión por el fútbol, amor por los perros y un bajísimo perfil

María Julia Rezzuto, recientemente casada con Luciano Pereyra, mantiene una vida alejada de los medios y las redes sociales, a pesar de su vínculo con una de las figuras más reconocidas de la música popular argentina. Profesora de inglés, aficionada al fútbol y amante de los animales, su perfil discreto contrasta con la exposición de su pareja, con quien comparte una relación desde hace más de seis años.

La vida de Julia, esposa de Luciano Pereyra: lejos de los medios y apasionada por el fútbol

Julia, la esposa de Luciano Pereyra, construyó un perfil reservado pese a su cercanía con una figura pública como el cantante. Entre su trabajo como profesora de inglés, su participación en actividades deportivas y su entorno familiar, conforma un presente que prioriza la privacidad sin dejar de lado sus intereses personales.

La profesora tiene 40 años y ejerce como docente en una escuela de la localidad bonaerense. Con más de 15 años de experiencia en el ámbito educativo, trabajó tanto en instituciones públicas como privadas, y también en institutos de enseñanza de idiomas. En su perfil profesional, se presenta como una persona responsable, eficiente y con habilidades de comunicación, actualmente desempeñándose en modalidad remota.

La relación con Luciano Pereyra comenzó en 2019, aunque ambos optaron por mantenerla en reserva durante los primeros años. La oficialización llegó de manera gradual, a través de publicaciones esporádicas del cantante en fechas especiales. En una de ellas, con motivo del Día de San Valentín, en el que compartió una imagen junto a Julia Rezzuto, acompañada por un mensaje afectuoso.

Uno de los aspectos que más llamó la atención del entorno del artista es la afición de la docente por el fútbol. En su tiempo libre, integra un equipo femenino amateur, con el que entrena y participa de encuentros recreativos. Esta actividad, que practica desde hace varios años, forma parte de su rutina semanal y representa un espacio de disfrute personal.

Otro rasgo destacado de su vida cotidiana es el vínculo con los animales. Julia Rezzuto y Luciano Pereyra conviven con varios perros, entre ellos Poncho y Rocky, que suelen aparecer en las publicaciones del cantante. La pareja comparte el gusto por la vida al aire libre y la compañía de sus mascotas, que forman parte de su entorno habitual.

La casa que comparten en Luján, ciudad natal de Pereyra, fue diseñada como un espacio de descanso y conexión con la naturaleza. De estilo rústico y rodeada de vegetación, la vivienda refleja una elección de vida centrada en la calma y la privacidad. Allí, cada ambiente fue pensado para el uso cotidiano, con materiales nobles, luz natural y una distribución funcional.

La vida cotidiana de Julia, esposa de Luciano Pereyra, transcurre entre rutinas laborales, vínculos afectivos y espacios personales que reflejan elecciones sostenidas en la discreción. Su interés por el deporte, la cercanía con los animales y su actividad como docente delinean un presente ajeno al circuito mediático.

VDV