KIRSTY HAYES, EMBAJADORA BRITANICA (F.DeBartolo/Perfil)
ENTREVISTA

Kirsty Hayes, embajadora británica en Argentina: "Tomo mate amargo y me gusta el asado"

La diplomática abrió las puertas de su residencia oficial, un ex palacio declarado monumento histórico, y contó porqué adoptó los hábitos locales. También tiene un caballo argentino con el que practica equitación.

Su camino profesional recién se iniciaba, pero cuando a Kisty Hayes le preguntaron cuál sería su cargo ideal a futuro, su respuesta y deseo terminó en presagio. “Comencé mi carrera hace 25 años. Y cuando en mi primera semana en la oficina me hicieron esa pregunta yo dije que quería ser embajadora en Argentina. ¡Nunca pensé que sería una realidad! Así que estoy súper contenta de haber llegado aquí. Ha sido un tiempo muy interesante y desafiante también”, confiesa la embajadora británica en Argentina, que en la previa a la histórica coronación de Carlos III y su esposa, Camilla Parker, como rey y reina consorte del Reino Unido, recibió a CARAS en su residencia oficial. 

Kirsty Hayes y su esposo, Peter, junto a sus mascotas

   “La realidad es que mi experiencia ha sido fantástica. He disfrutado de todo. Tuve la oportunidad de viajar por el país y ya visité 7 provincias, algo que en un año y medio no está mal. Argentina tiene tantos paisajes hermosos, tanta variedad en términos culturales. Pude conocer a muchos argentinos y tengo un montón de amigos de aquí. Entonces, ha sido muy positivo, aunque también hubo momentos desafiantes, como cuando falleció la reina hace unos meses. El año pasado también fue el cuadragésimo aniversario del Conflicto del Atlántico Sur. Usamos la oportunidad para concentrarnos en temas de reconciliación e hicimos eventos con veteranos de ambos lados”, detalla Kirsty Hayes.

Su primera vez en suelo argentino fue hace diez años, cuándo se alojó solo dos días en la pintoresca propiedad que ahora es su casa: el ex Palacio Madero Unzué y, desde 1945, residencia diplomática del Reino Unido. Su marido desde hace 21 años, Peter Hayes, también diplomático y con un doctorado en física nuclear, había brindado una conferencia en Bariloche 30 años atrás.    

Sus primeros días en Argentina

“Cuando me instalé en Buenos Aires al principio una de las cosas que me llamaba la atención, lógicamente, era lo tarde que se cenaba. Recuerdo que tras mis primeros meses un día no tenía compromisos oficiales y ya cenada y casi lista para ir a la cama, recibí una llamada de una amiga que me invitaba en dos horas ¡a cenar! (risas) Pero ya estoy lista para irme a dormir, le dije. Ahora estoy un poco más argentina en mis hábitos”, reconoce Kirsty, mamá de Liberty (18) y Jasper (16), quienes están estudiando en Inglaterra, pero vienen de visita durante sus vacaciones y disfrutan mucho de Argentina. “Con ellos viajamos a Misiones, Salta. Jujuy y a la Patagonia. Esta es la primera vez que no estoy con ellos, porque ya son más grandes. Mi trabajo siempre me permitió estar con ellos”, explica.

   “Además de comer más tarde, estoy más acostumbrada a la tradición de los asados. Recibo muchas invitaciones, pero también tenemos una linda parrilla en el jardín. Así que de vez en cuando hacemos asados aquí con amigos que no tienen nada que ver con el mundo del trabajo. Adopté la costumbre de tomar mate, amargo, y también se lo pasé a mi hermano y a su esposa. No soy del alfajor, ni del dulce de leche, pero sí del mate amargo y del asado”, agrega Hayes.

Uno de los salones de la residencia oficial, ex Palacio Madero Unzué 

Antes de ser nombrada jefa de la delegación diplomática del Reino Unido en la Argentina, Kirsty se desempeñó como embajadora ante Portugal y ejerció diversos cargos en la Cancillería Británica y en el Ministerio del Interior, tanto en Londres como en otras ciudades, entre ellas, Washington y Hong Kong. 

 “Cuando entré en el ministerio la mayoría de los embajadores eran hombres. Ahora la situación es mucho mejor. No hay igualdad del todo pero en los países del G20, hay mitad hombres, mitad mujeres ”, admite la embajadora, quien estudió Arqueología, pero se enamoró del mundo diplomático y obtuvo una maestría en Relaciones Internacionales influida por una tía que trabajó en el British Council. “También la equitación es mi otra gran pasión. Tengo un caballo aquí y cinco más en el Reino Unido. Este es un país fantástico para estas cosas. También estoy empezando a practicar un poco de polo”, revela.

El elegantísimo comedor de la residencia

Su vida en Buenos Aires

   En Buenos Aires, además de compartir sus días con su marido, Kirsty vive con sus dos perros adoptados, Rivao y Cereja, un podenco portugués y un cão da serra de estrela, y con su gata Biff. “Cada día es diferente siendo embajadora. Puedo pasar todo un día en una visita oficial en una de las provincias teniendo reuniones con las cooperadoras o con los intendentes. Y otro, con la comunidad británica que en la Argentina es muy fuerte”, asegura Kirsty. 

Hayes durante la celebración de la coronación de Carlos III en Buenos Aires 

   Y respecto a la histórica coronación de Carlos III, concluye la embajadora: “Hay pocas personas vivas en el reino que tienen experiencia en una coronación. Cuando nací la reina ya había festejado 25 años como monarca. La ceremonia tiene una historia muy extendida, de casi mil años. Y con tanta experiencia, será un espectáculo increíble. Vamos a conmemorar el evento también aquí en Argentina, como en todas nuestras embajadas y sedes diplomáticas. Hay muchas personas muy interesadas en este momento tan histórico, un momento de unidad y celebración para el Reino Unido. Es un momento único en mi vida”.

Fotos: Federico de Bártolo.

Producción: Sol Miranda.

   

  

 

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