Constelaciones y Kabbalah: Un mapa para tu transformación personal

¿Qué es la kabbalah y cuál es su origen histórico?

La Kabbalah es una sabiduría espiritual que nos ayuda a entender el propósito de nuestra existencia y las leyes que rigen el universo. Su significado es "recepción", porque se trata de recibir esta sabiduría que ha sido transmitida de generación en generación.

Durante mucho tiempo, su estudio estuvo reservado a unos pocos, pero hoy en día cualquiera puede aprenderla, sin necesidad de conocimientos previos. La Kabbalah nos muestra que todo en la vida está interconectado y que, a través de la corrección de nuestra alma, podemos alcanzar una vida plena y en armonía con la fuerza superior que lo gobierna todo.

En mi caso, sigo la enseñanza de grandes cabalistas como Yehudá Ashlag (Baal HaSulam), Baruj Shalom HaLevi Ashlag (Rabash), y actualmente estudio con Michael Laitman, quien continúa esta tradición de sabiduría. El Dr. Michael Laitman fundó en la década de 1990 la organización Bnei Baruch (Hijos de Baruch), en honor a su maestro, el Rabino Baruch Shalom HaLevi Ashlag (Rabash). Esta organización se dedica a la enseñanza y difusión de la Kabbalah, ofreciendo materiales de estudio en más de 30 idiomas y llegando a estudiantes en todo el mundo.

¿Qué son las constelaciones familiares y cuál es la relación que podemos encontrar entre estas dos prácticas?

Las Constelaciones Familiares, desarrolladas por Bert Hellinger, abordan las dinámicas emocionales y los patrones heredados dentro de un sistema familiar. Este enfoque permite desvelar y liberar las cargas que afectan las relaciones y las decisiones de los individuos, restableciendo el orden y la armonía. La técnica se basa en la idea de un campo sistémico, donde las conexiones entre los miembros de la familia son fundamentales para entender los problemas emocionales que afectan a la persona.

Además de Bert Hellinger, otro referente importante en este campo es Berkley, quien también trabajó en la comprensión de las dinámicas familiares y la importancia de reconocer los vínculos invisibles que condicionan la vida de las personas.

Por su parte, la Kabbalah es una sabiduría espiritual que se enfoca en la corrección del alma, enseñándonos que somos parte de una red más grande de interconexiones universales. Su propósito es ayudarnos a transformar el deseo de recibir para uno mismo (el egoísmo) en un deseo de otorgar, alineándonos con la fuerza superior que rige todo. A través de la corrección interna, la Kabbalah guía hacia una sanación personal y espiritual profunda.

La diferencia principal entre ambas prácticas es que las Constelaciones Familiares se centran en resolver conflictos emocionales y familiares a nivel terrenal, mientras que la Kabbalah ofrece una visión más trascendental, buscando la transformación espiritual. Ambas coinciden en que estamos interconectados y que nuestras experiencias personales y familiares están influenciadas por algo mayor.

Aunque las constelaciones se enfocan en lo emocional y familiar, la Kabbalah trabaja a un nivel más profundo, transformando nuestro ser y conectándonos con el propósito divino de nuestra existencia. Ambas prácticas pueden complementarse, ayudando a sanar tanto en el ámbito personal como espiritual.

¿Como abordo mis talleres y cursos, utilizando las constelaciones familiares y la sabiduría de la Kabbalah, para guiar a las personas en su autoconocimiento y en el proceso de corrección de su egoísmo?

En mis talleres, cursos y sesiones de constelaciones familiares, oriento a mis consultantes en un proceso de autoconocimiento profundo, donde abordamos el deseo de recibir desde una perspectiva más amplia, que va más allá de la superficie. Utilizo dinámicas sistémicas y dramatizaciones a través de las constelaciones familiares para ayudar a los participantes a reconocer los orígenes de sus deseos, los cuales, en muchos casos, provienen de una carencia generacional o de patrones familiares. Sin embargo, a diferencia de las constelaciones familiares, que abordan principalmente las dinámicas superficiales, en mis talleres también profundizamos en el origen de estos deseos, que tiene que ver con el egoísmo inherente al ser humano.

La Kabbalah explica que el deseo de recibir para uno mismo es un proceso que tiene raíces profundas en la creación, un vacío necesario para la existencia misma, pero que debe ser corregido. A través de esta sabiduría, los oriento a entender que, si bien el deseo de recibir se presenta en sus vidas de manera cotidiana, su corrección es posible solo cuando se trabaja a nivel más profundo. Aquí es donde se hace indispensable buscar un maestro espiritual que pueda guiarlos en este proceso de transformación interna. En mis talleres, trato de ofrecer un primer acercamiento, brindándoles un conocimiento básico sobre cómo funciona el deseo de recibir, cómo podemos identificarlo y cómo trabajar en su corrección, todo esto aplicado desde mi experiencia y sensaciones personales, y teniendo como base principal lo que he aprendido de mi maestro que es: no podemos hablar de aquello que no conocemos y no hemos experimentado.

Para aquellos que sienten que este camino puede llevarlos a una mayor profundidad, los oriento hacia el Centro de Beneí Baruch, donde encontrarán un maestro con un largo camino recorrido  en esta sabiduría y con una visión más amplia y profunda, como lo es Michael Laitman, quien guía a aquellos que buscan avanzar en su comprensión de la Kabbalah y en su proceso espiritual. Mi objetivo es ayudar a los participantes a dar el primer paso en este camino, mientras se alinean con un maestro adecuado que los acompañará en su proceso de corrección del alma.

¿ Qué recomendaciones daría a una persona que quiere iniciarse en el camino de esta sabiduría milenaria?

Lo que recomendaría a una persona que desea iniciarse en el camino de la sabiduría de la Kabbalah es que no dude en comenzar su proceso de autoconocimiento. Este es el primer paso fundamental que lo llevará a un despertar gradual hacia esta sabiduría milenaria. La Kabbalah habla de la "chispa divina" que está en cada uno de nosotros y que puede ser despertada cuando nos orientamos hacia el conocimiento y la comprensión más profunda de nuestra alma. Este despertar no es algo instantáneo, pero cuando esa chispa se enciende en el corazón, el camino hacia la conexión con la sabiduría se vuelve mucho más claro.

Les diría que no se demoren, porque como sea van a transitar el proceso de corrección y de crecimiento personal y  al despertar a esta sabiduría, uno comienza a entender por qué le pasan las cosas que le pasan, y esa comprensión le da sentido a las experiencias. Así, no solo se atraviesa el sufrimiento con mayor conciencia, sino que se puede vivir el proceso con más claridad y propósito.

Además, les sugeriría que empiecen con sesiones de constelaciones familiares, donde abordamos las raíces de los patrones familiares y emocionales, y los talleres que ofrezco, como el de LIBERÁNDONOS DE LAS DEPENDENCIAS EMOCIONALES Y RECONOCERSE PARA SOLTAR, que ayudan a trabajar la autoestima y a liberarse de viejas cargas. También, invitaría a formar parte de mi comunidad de WhatsApp gratuita, donde diariamente comparto reflexiones y audios para continuar con el autoconocimiento de manera constante.

Iniciar el camino de la Kabbalah no significa que no habrá dificultades, pero sin duda les permitirá encontrar un sentido más profundo en cada uno de los pasos que den hacia su transformación.

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