Cómo es la vida de Axel Caniggia en Alemania: alejado de los medios y dedicado al arte

En el universo excéntrico de los Caniggia, Axel Caniggia siempre fue el más reservado. Hermano mayor de los mediáticos Alex y Charlotte Caniggia, e hijo de Mariana Nannis y Claudio Paul Caniggia, Axel optó por un camino muy diferente al de sus seres queridos, lejos de las cámaras y del espectáculo. Mientras el resto de su familia gana visibilidad en realities, escándalos o programas de televisión, él decidió desaparecer del radar y construir una vida silenciosa, centrada en el arte y la introspección.

Su historia personal está envuelta en misterio, pero con el paso del tiempo se fueron revelando detalles que lo muestran como un hombre sensible, con un mundo propio y un estilo de vida que contrasta notablemente con el de su entorno más cercano. Aunque su nombre aparece esporádicamente en entrevistas que brindan sus hermanos, Axel se mantuvo firme en su decisión de alejarse de los medios.

Cómo es la vida de Axel Caniggia en Alemania: alejado de los medios y dedicado al arte

Radicado desde hace años en Frankfurt, Alemania, Axel Caniggia vive de forma casi anónima. Sus apariciones públicas son prácticamente inexistentes, y su vínculo con los medios es nulo.

Alex Caniggia, su hermano menor, reveló algunos detalles en una entrevista donde lo describió con humor y asombro: “A él le chupa todo un huevo, ni teléfono tiene, es dos años más grande”. La frase sintetiza el espíritu libre y desentendido con el que vive Axel, a quien ni las fechas especiales logran sacarlo de su rutina: “Le decís, ‘vení para Navidad, nos juntamos en una ciudad’ y te dice ‘No, vengan ustedes’”.

Según contó Alex, su hermano es muy exigente con lo que consume y suele tener opiniones filosas sobre lo que considera superficial: “Le chupa un huevo todo, pero es un bohemio cheto. Es alto careta, no sabés cómo se viste. Se manda a hacer él los trajes con flores o capaz rojo con dragones blanco y negro”. Su estilo extravagante y sofisticado es un reflejo más de su personalidad fuera de lo común.

Lejos de los flashes y en compañía de su esposa Nieves, Axel dedica gran parte de su tiempo a la pintura. Trabaja desde su casa y desarrolla una técnica que su hermano define como impresionante: “Hace hiperrealismo, parecen fotos sus dibujos”. Sus obras, intensas y detalladas, le permitieron ganarse un lugar en el ámbito artístico, aunque no busca reconocimiento público. Su vida transcurre en espacios privados, rodeado de silencio, libros y pinceles.

En una entrevista de años atrás, el propio Axel se definió con palabras que explican su alejamiento del mundo mediático: “Soy una persona que disfruta de las cosas sencillas. Me gusta pasear por calles que nunca recorrí, pasar horas en las librerías, tomar un café, fumar un cigarrillo, la tranquilidad de Marbella, el atelier que tengo en mi casa en un cuarto común, donde pinto mucho de noche”.

Hoy, a sus 34 años, Axel Caniggia mantiene su decisión de preservar su intimidad. Sin redes sociales activas ni intenciones de entrar al juego de la exposición, lleva una vida tranquila y coherente con sus valores. Lejos del ruido que suelen generar Alex Caniggia y Mariana Nannis, Axel eligió una existencia donde el arte y la paz son protagonistas.

MVB