El acuerdo de separación que convirtió en multimillonario a Iñaki Urdangarin
El exduque de Palma estaría recibiendo un monto mucho más importante que el que declara.
Mientras en las últimas semanas circularon imágenes de Iñaki Urdangarin y su pareja, Ainhoa Armentia, disfrutando de unas lujosas vacaciones en Sicilia, muchos se preguntan cómo logra el exduque de Palma mantener un estilo de vida digno de un magnate, pese a declarar ingresos mensuales de apenas 900 euros.
Lo cierto es que detrás de esa vida sin preocupaciones se esconde un acuerdo económico secreto firmado en Suiza, que habría sido negociado tras su separación definitiva de la infanta Cristina. Se trata de un segundo convenio, poco conocido, que le garantiza a Urdangarin una fortuna que no solo le permite mantener su alto tren de vida, sino también sostener a su actual pareja, quien dejó su trabajo en un bufete de abogados hace ya más de un año.
La vida acomodada de Iñaki Urdangarin
Lejos quedó aquella imagen del yerno ejemplar que supo ganarse el cariño del rey emérito Juan Carlos I. Luego del escándalo del caso Nóos, que lo llevó a prisión y manchó la imagen de la monarquía española, Iñaki pareció desaparecer del foco mediático. Sin embargo, desde que recuperó su libertad y oficializó su relación con Ainhoa Armentia, una nueva estrategia comenzó a tomar forma.
Según trascendidos, ya había tomado la decisión de separarse de la infanta mucho antes de ingresar en la cárcel, aunque fue ella quien se resistió durante años, intentando mantener la unidad familiar y con la promesa del propio rey Juan Carlos quien le dijo "solucionarle la vida" si se mantenía callado.
Cumpliendo con su palabra, el emérito habría realizado dos transferencias de un millón de euros cada una, desde cuentas suizas. El monto estaría relacionado con una propuesta editorial que le ofrecía a Iñaki escribir un libro explosivo sobre su vida en el seno de los Borbón, que luego rechazó, garantizando recibir este dinero a cambio de su silencio.
Además de ese millonario pago, el acuerdo incluiría un pago vitalicio de 25.000 euros mensuales. En la actualidad, estos pagos estarían siendo asumidos directamente por Juan Carlos I, pero, según se estipuló, cuando el exmonarca fallezca, será la infanta Cristina quien deberá continuar con las transferencias a su exmarido.
Mientras el público sigue atento a cada paso de la realeza española, Urdangarin y Armentia continúan disfrutando de los privilegios que les otorga un pasado que, aunque intentan dejar atrás, sigue financiando su presente.
VO