Guido Sueldo y el arte de narrar territorios: la mirada que transforma destinos turísticos en Argentina

En tiempos donde la imagen se vuelve efímera, la obra de Guido Sueldo permanece. Su enfoque artístico —profundamente sensorial y narrativo— se ha convertido en una herramienta de puesta en valor para espacios culturales y turísticos en Argentina. Su cámara no retrata: escucha, interpreta y honra. 

En Mar del Sur, uno de los hitos más significativos de su trabajo fue su intervención visual en el histórico Hotel Boulevard Atlántico, que reabrió sus puertas luego de décadas de abandono. En lugar de captar solamente su arquitectura, Sueldo eligió relatar visualmente la historia de un lugar que, más que un edificio, es símbolo de una memoria colectiva.

A través de sus encuadres, el hotel recupera no solo su imagen, sino su dignidad patrimonial. “Volver a mirar con respeto los espacios que nos vieron crecer es una forma de agradecer”, expresó en su cobertura. Ese mismo espíritu se refleja en su trabajo en Las Palapas, Mendoza, un complejo turístico que combina naturaleza y experiencias culturales. 

Durante su cobertura, no solo documentó el entorno natural, sino también la atmósfera de los eventos de música electrónica que allí se realizan. Su sensibilidad permitió capturar la esencia del vínculo entre paisaje, cuerpo y sonido, narrando con imágenes la energía viva del encuentro.

En la Patagonia argentina, Sueldo fue convocado para desarrollar una serie fotográfica vinculada a circuitos costeros de interés turístico. Su lente no buscó la postal convencional, sino una representación honesta de los paisajes australes. En cada imagen se percibe la conexión con el entorno y una intención clara: mostrar sin distorsionar, intensificar sin intervenir. 

A lo largo de su trayectoria, Guido Sueldo ha demostrado que el turismo también se construye desde lo simbólico. Su trabajo despierta lo que en muchos estaba dormido: el orgullo por lo propio. 

Lejos de replicar modelos, su mirada propone una estética que nace del compromiso con su tierra. Lo suyo no es mostrar un lugar, sino darle voz. Así, ha logrado posicionarse como uno de los referentes de la narrativa visual argentina vinculada al turismo y al territorio. Un autor que, sin perder su raíz, sabe traducir lo local en lenguaje universal.