martes 20 de mayo del 2025

Moda: el emprendimiento que nació como un hobby y se transformó en un proyecto de vida

Inspirada por sus hijos y forjada con esfuerzo, su creadora convirtió un pasatiempo en una fuente de ingresos y expresión personal que ya suma más de mil diseños únicos.

Thiawamini
Mariela Montenegro es la dueña de Thiawamini. | Gtza. Thiawamini.

Thiawamini no nació como un negocio, sino como un pasatiempo familiar. Su fundadora —una apasionada del diseño— comenzó creando accesorios en su tiempo libre, sin imaginar que ese hobby inicial se transformaría con los años en una verdadera fuente de sustento y realización profesional.

Antes de emprender, había trabajado en una reconocida casa de accesorios de la Ciudad de Buenos Aires. Esa experiencia fue clave para su desarrollo: allí perfeccionó técnicas, aprendió a entender las tendencias y pulió el estilo que más tarde definiría sus propias creaciones. Fue durante esa etapa que empezó a soñar con algo propio.

Thiawamini

En ese punto de inflexión surgió el nombre que hoy identifica su marca: Thiawamini, una palabra tan única como significativa, compuesta por las iniciales de los nombres de sus hijos, quienes representan su mayor inspiración y el motor de todo lo que hace.

Thiawamini

Gracias al apoyo de la municipalidad, tuvo la posibilidad de viajar por distintas provincias, participar en ferias y eventos, y llevar sus productos a más personas. Cada una de esas instancias fue clave para dar a conocer su trabajo y conectar con nuevas clientas.

Thiawamini

Thiawamini

Actualmente, Thiawamini se dedica a la venta directa al público, con un diferencial que la distingue: cada diseño es personalizado y absolutamente único. A lo largo de los años, su creadora confeccionó más de 1.000 prendas, sin repetir jamás una pieza. Para ella, crear no es sólo trabajar: es expresarse, desconectarse de las preocupaciones cotidianas y dar sentido a su vida profesional.

Thiawamini es mucho más que un emprendimiento: representa libertad, amor, arte y crecimiento. Con la mirada puesta en el futuro, su creadora sueña con seguir aprendiendo y compartiendo su saber, porque —como ella misma afirma— “el arte de crear nunca se termina”.

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