Los hijos de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina (redes)
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Irene Urdangarin y sus hermanos reciben una tercera herencia millonaria

Los hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin recibirán una cuantiosa suma que los salvará de por vida.

El apellido Urdangarin, no sólo es sinónimo de escándalos mediáticos. Aunque alejados ya de la vida institucional de la Corona española, Juan, Pablo, Miguel e Irene, los hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, son noticia también por la considerable herencia que recibirán una vez que sus padres no estén más. 

Según fuentes cercanas al entorno real, el rey emérito Juan Carlos I habría tomado la decisión de dividir su patrimonio personal, estimado en unos dos mil millones de euros, entre sus hijas, la infanta Elena y la infanta Cristina, dejando fuera de este reparto a su hijo, el actual monarca Felipe VI, quien sí participará en la futura distribución de la fortuna de su madre, la reina Sofía.

Miguel y Pablo Urdangarin. 

Esta herencia doble coloca a Cristina en una posición privilegiada para beneficiar directamente a sus hijos quienes a pesar de su bajo perfil público, figuran como destinatarios de una suma exorbitante. 

El dinero de Iñaki Urdangarin y la herencia a sus hijos

Más allá de esta herencia declarada, existe otra que va más allá de los canales reales. El dinero de Iñaki Urdangarin, también será parte de a fortuna de los hijos de la Infanta Cristina. El ex deportista recibe  una indemnización millonaria cercana a los dos millones de euros y una pensión vitalicia de 25.000 euros mensuales. Por este motivo, Iñaki comenzó a invertir en propiedades inmobiliarias, que estarían a nombre de sus hijos. A esta lista se sumarían, eventualmente, los dos hijos de su actual pareja, Ainhoa Armentia. 

Irene y Juan Urdangarin. 

El mapa hereditario de los Urdangarin es, entonces, doble: por un lado, el vínculo con la familia Borbón asegura una transmisión de riqueza real; por otro, la administración e inversiones personales de Iñaki refuerzan esta garantía financiera. En ambos casos, sus hijos están llamados a disfrutar de una vida resuelta desde el punto de vista económico, incluso si decidieron mantenerse al margen de los focos mediáticos.

 

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