lunes 07 de octubre del 2024

Jesica Castriota

Jesica Castriota es Licenciada en Psicología, especialista en terapia cognitiva. En esta ocasión nos brinda información sobre fobias.

CREDITO CARAS

Lic. ¿Qué es una fobia?

Una fobia es un trastorno de ansiedad caracterizado por un miedo extremo y debilitante a un objeto, una situación o una actividad. Suele ser irracional por el nivel de miedo que se experimenta. Las fobias suelen estar causadas por una situación traumática, estresante o por imitación de un familiar.

Existen tres tipos de fobia, la Fobia Social o Trastorno de Ansiedad Social (TAS), las Fobias Específicas y la Agorafobia. 

El trastorno de ansiedad social es el miedo o ansiedad persistente e intenso ante situaciones sociales específicas, la persona cree que puede ser juzgado negativamente, avergonzado o humillado. La fobia específica se caracteriza por un miedo extremo, irrazonable e irracional asociado con un objeto, situación o concepto específico que representa poco o ningún peligro real pero que provocan una gran ansiedad, por lo que se intenta no acercarse al objeto o situación.
Y la agorafobia es la ansiedad intensa y/o la evitación de situaciones (por ejemplo, estar en multitudes o centros comerciales o conducir) que pueden ser difíciles de abandonar o que no dispondrían de ayuda inmediata si se desarrollaran síntomas incapacitantes similares al pánico. La agorafobia es un trastorno de la ansiedad que suele aparecer después de uno o más ataques de pánico.

La fobia se manifiesta mediante síntomas físicos como la sudoración, respiración anormal, aceleración del latido del corazón, temblores, escalofríos, dolor en el pecho, sequedad de boca, mareos, dolor de cabeza, etc. Síntomas psicológicos como pensamientos distorsionados respecto a la situación o estímulo. Y síntomas conductuales como la evitación de la situación o estímulo temido.

La terapia cognitiva conductual es uno de los tratamientos más efectivos para las fobias, en ocasiones puede ser preciso combinarlo con psicofármacos para disminuir los síntomas físicos que acompañan a la fobia y ayudar así a la persona a afrontar la situación. El tratamiento psicoterapéutico consiste en la utilización de técnicas de relajación, como la respiración profunda o la relajación muscular progresiva. También es importante trabajar sobre los pensamientos que surgen y que están asociados a la fobia, esto se logra a través de la reestructuración cognitiva que está orientada a combatir las ideas catastróficas que presentan las personas frente a la situación u objeto. La exposición progresiva se centra en cambiar el modo en que se reacciona al objeto o a la situación que da miedo. La exposición disminuye la ansiedad; por ejemplo, en el miedo a los ascensores, la terapia puede ir de simplemente pensar en entrar en un ascensor, a mirar fotografías de ascensores, acercarse a un ascensor y luego ingresar. A continuación, subir un piso y luego subir varios pisos.

La exposición progresiva ayuda a que, lentamente, la persona vaya tomando contacto con aquello a lo que tiene miedo.

Si la ansiedad afecta de forma negativa tu desempeño en tu vida cotidiana, el trabajo, en tus vínculos o en situaciones sociales, consulta a un profesional de la salud mental.

Datos de contacto:

Celular: 1150278095

Instagram: @psic.jesica

Facebook: Lic. Castriota Jesica - Psicóloga

En esta Nota