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• Pilar, ¿qué te inspiró a crear “La Pelu de Pili” y cómo fue tu trayectoria en el mundo de la peluquería hasta ahora?
Desde muy chica, la peluquería fue mi pasión. Empecé a peinar a familiares y amigas mientras iba al colegio, primero en el living de mi casa y luego en el quincho del fondo. Con el tiempo, mi hobby se transformó en mi vocación. A lo largo de mi carrera como estilista, estudié Ingeniería Civil entre 2016 y 2023, me recibí y trabajé en ese campo durante tres años, pero jamás dejé de lado mi amor por la peluquería. Siempre seguí capacitándome y atendiendo clientas en casa. Luego de trabajar un tiempo en ambas profesiones, en abril de este año tomé la gran decisión de abrir mi propio espacio, “La Pelu de Pili”, para dedicarme de lleno a mi pasión. Todo lo demás quedó a un lado de mi camino. Quería darle un espacio merecido a mi emprendimiento, el cual había tenido como plan B durante tanto tiempo, y las experiencias siempre me demostraron que la peluquería era mi plan A. Así fue como, en julio de este año, después de varios meses de obra, realizamos la inauguración de la Pelu.
• Te destacas por tu "pasión por el rubio". ¿Qué es lo que más te gusta de este color y cómo logras que cada cliente encuentre su tono ideal?
Para mí, el rubio es un color tan hermoso, es muy desafiante y creo que eso es lo que me fascina. Es un desafío porque lograrlo lleva muchos cuidados y procedimientos; me encanta porque puede transformar por completo la imagen de una persona. Me gusta la posibilidad de personalizar el color según la personalidad y las características de cada una. Para mí, no existe un “rubio único” que funcione para todas; admito que soy fan de los rubios fríos, y muchas clientas me eligen por eso. No es fácil. Desde el primer diagnóstico, trato de entender qué busca la clienta y qué es lo mejor para su tipo de pelo. La clave está en la personalización: un tono mal elegido puede no reflejar la personalidad de la clienta, mientras que el adecuado puede hacer que se sienta renovada, más segura de sí misma y feliz con su imagen. Trabajar con rubios es un desafío, y mantener la salud del cabello durante el proceso es fundamental. No todos los cabellos soportan las mismas técnicas, y por eso es tan importante hacer una evaluación previa. Cada paso, desde la decoloración hasta el mantenimiento posterior, está pensado para proteger el cabello y garantizar resultados duraderos.
• ¿Cuáles son los desafíos más comunes que enfrentas al trabajar con rubios, y cómo los superas para asegurar resultados excepcionales?
Uno de los principales desafíos al trabajar con rubios es lograr una decoloración sin dañar la fibra capilar, especialmente cuando se trata de extracciones de colores negro o rojo, o de trabajos anteriores que han dejado el cabello debilitado. Para superar esta situación, en la Pelu utilizamos productos de alta calidad y siempre recomendamos preparar el cabello con tratamientos reconstructores, para asegurarnos de que esté en las mejores condiciones antes de someterlo a un proceso tan invasivo. Esto nos permite obtener un rubio espectacular sin comprometer la fibra capilar, cuidando cada paso para que el resultado sea tan saludable como hermoso. No siempre se puede lograr el tono deseado en una sola sesión, y esto es algo que explicamos a mis clientas desde el principio: a veces es mejor avanzar gradualmente para preservar la integridad del cabello. Lo importante es que el proceso sea meticuloso y que los productos utilizados estén orientados a proteger y fortalecer el cabello a medida que avanza el proceso de decoloración.
Otro desafío común es que, después de realizar el color, muchas clientas no siguen los cuidados necesarios en casa. El mantenimiento de un rubio, sobre todo cuando se trata de tonos fríos o muy claros, requiere un compromiso constante con los productos adecuados. No se trata solo de lograr el color en el salón, sino de mantenerlo y cuidar la salud del cabello a largo plazo. Si las clientas no utilizan tratamientos de nutrición, mascarillas hidratantes o productos específicos para el mantenimiento del rubio, el color puede perder brillo rápidamente y el cabello puede resecarse. Por eso, siempre les insisto en la importancia de continuar con los cuidados en casa: los shampoos poscolor, las mascarillas reparadoras y los protectores térmicos son esenciales para mantener el rubio vivo y el cabello sano.
• En tu estudio privado, ¿qué experiencias únicas ofreces a tus clientes que lo diferencian de un salón tradicional?
En nuestra peluquería ofrecemos un ambiente íntimo y relajado. Al ser un espacio más privado y atender solo por turnos, podemos dedicar tiempo y atención personalizada a cada clienta, sin prisas. Además, nos enfocamos en ofrecer diagnósticos capilares detallados y tratamientos específicos según las necesidades de cada persona. Este enfoque individualizado hace que la experiencia no sea solo un cambio de look, sino un momento de autocuidado y bienestar.
• ¿Te gustaría compartir con los lectores de CARAS una historia memorable de un cliente cuya transformación en “La Pelu de Pili” impactó positivamente en su autoestima y te haya emocionado como profesional?
Una de las historias que más me emocionó y también me hizo reír fue la de una clienta que llegó a la pelu después de haber pasado por varios salones sin sentirse satisfecha. Estaba frustrada porque su pelo no reflejaba quién era realmente, y su confianza estaba por el suelo. El día de su turno, estábamos cuatro peluqueras trabajando en su cabello, y no te voy a mentir, todas nos mirábamos nerviosas mientras avanzábamos. Nos preocupaba no cumplir con sus expectativas, y la tensión se podía sentir en el aire. Cuando finalmente terminamos y le mostramos el resultado, el salón se quedó en silencio por unos segundos (había otras clientas también mirando). De repente, ella empezó a llorar, pero de felicidad. No lo podía creer. Estaba tan emocionada que nos contagió; terminamos las cinco abrazadas, llorando y riendo a la vez. Me acuerdo y me río porque fue una gran liberación de tensión; el esfuerzo valió la pena. No solo logramos darle el look que buscaba, sino que también recuperó su confianza. Lo más gracioso fue vernos a todas, que habíamos estado tan nerviosas, celebrando juntas el éxito del trabajo. Esos momentos me recuerdan por qué amo esta profesión: no se trata solo de cambiar el pelo, sino de transformar cómo las personas se sienten consigo mismas.
• ¿Cuáles son tus planes a futuro para “La Pelu de Pili” y qué nuevas tendencias o técnicas te entusiasman más para 2025?
Para el futuro de la Pelu, mi principal objetivo es seguir perfeccionando las técnicas, enfocándome siempre en la calidad y la innovación. No busco tener mil clientas por día, sino ofrecer una experiencia realmente única y personalizada para cada persona que nos visite. Creo firmemente que invertir en el cuidado personal es esencial, y quiero que quienes nos eligen vivan una experiencia de cuidado y atención de principio a fin. Mi objetivo no es solo embellecer, sino también elevar la autoestima de cada clienta que pasa por nosotras.
Para mí, el 2025 se perfila como un año lleno de crecimiento y mejoras, tanto en técnicas de coloración como en tratamientos de cuidado capilar. Se viene el ingreso de marcas extranjeras que estaban bastante excluidas en nuestro país; con esto se podrán perfeccionar técnicas y brindar a las clientas tratamientos de reconstrucción súper tecnológicos. En cuanto a mi grupo de trabajo, el enfoque sigue siendo formar y fortalecer a mi equipo para que cada visita sea especial. Me entusiasma mucho ver a mis peluqueras crecer y mejorar; estoy comprometida en ofrecer lo mejor para que la pelu siga siendo sinónimo de excelencia.
PARA CONOCER MÁS:
Instagram: @peludepili
WhatsApp: 2216966532
