Hace pocas semanas, el presidente Mauricio Macri abrió su corazón y habló sin ningún tipo de vergüenza sobre la delicada situación que le tocaba vivir a su padre, Franco, quien murió este sábado por la noche, a los 88 años. El pasado 8 de febrero, días antes de su cumpleaños, el mandatario le brindó un mano a mano al filósofo Alejandro Rozitchner.
Notablemente acongojado, Macri detalló cual fue el último pedido que le hizo su padre, antes de perder la cordura . "Hace un año que no tengo trato consciente con él y el último trato consciente que tuve me pidió que le diera una pastillita para sacarlo de acá. Le dije: 'Papá, no se puede eso'. Ahí me dijo: 'Pero yo ya terminé, no tengo nada para hacer, mirá, no puedo hacer nada. Dependo de terceros para todo'. Le dije: 'No puedo, papá. No se puede'", relató Mauricio, al borde de las lágrimas.
"Espero que me toque una muerte rápida, tampoco quiero quedarme atrapado en la vida como lo está pasando mi padre, que está acá y no está acá. Hace más de un año está postrado ahí y si tiene algún momento de lucidez, la debe pasar muy mal. Porque debe tomar conciencia de su incapacidad de hacer y su pérdida de vitalidad", dijo el presidente de la Nación.