Los hijos de Adolfo Cambiaso, Nacho Figueras y Nico Pieres jugaron al polo en Palm Beach
Muchos hijos o familiares de polistas participaron el lunes del Avendaño Memorial, un torneo reservado para los “bajitos”.
Debe ser de los pocos deportes en los que el legado se transmite tan naturalmente de generación en generación. Inducidos por criarse desde muy pequeños en campos o predios rodeados de tacos y caballos, los hijos de los polistas suelen seguir el camino trazado por sus padres. Y manifiestan desde edades tempranas la afinidad y ductilidad que les brota por una disciplina de la que suelen terminar enamorándose.
Así se gestó un fenómeno que por estos años alcanzó su punto máximo de ebullición, a partir del crecimiento y desarrollo de muchos herederos de familias insignes del polo argentino. Adolfito Cambiaso (47) ya vivió la suprema experiencia de consagrarse campeón de Palermo junto a su hijo “Poroto” (17), pero detrás de él hay un sinnúmero de casos de jóvenes que incursionan en la órbita competitiva y hasta que comparten equipo con sus padres.
Los nombres de Bartolomé (22) y Camilo Castagnola (20), Cruz Heguy (19), Lukín Monteverde (17) e Hilario Figueras (23) son algunos de esos tantos ejemplos. Durante la temporada internacional de Palm Beach, habitualmente plagada de polistas argentinos, los chicos también tienen su espacio donde competir. Inspirada en la tradicional Copa Potrillos que se disputa todos los diciembre en Buenos Aires, el Avendaño Memorial es un torneo creado en los años ‘80 que todos los chicos quieren jugar.
Organizado ahora por la poderosa World Polo League, la edición del 2023 se disputó el lunes 20 en las instalaciones del Santa Rita Polo Farm en sus dos categorías, una para chicos de entre 16 y 21 años (Tackería President’s Day Cup) y la Avendaño Memorial para chicos de hasta 15 años en sus distintos niveles. Una jornada rebosante de energía y diversión cuyo propósito está más allá de los resultados y las copas, pero que de todas maneras permite ir detectando el talento de los futuros cracks.
Como era de esperarse, entre los veinte equipos mixtos que participaron abundaron los herederos de apellidos ilustres. Myla Cambiaso (12); Milo (12), Rafa (7) y Olivia Mac Donough; Artemio (13) y Alba Figueras (10); Facundo y LorenzoNovillo Astrada; Lorenzo (10) e Isabel Nero (6); Vicente (10) y Agustín Stirling; Rafa Laprida; Benjamín Toccalino: Antonio Dorignac; India Uranga, e Indalecio (10), Félix (6) y Azucena Pieres serán muy posiblemente los próximos nombres propios del mejor polo del mundo. Chicos que llenaron de orgullo a sus padres como Félix Pieres, quien pese a la precocidad de sus seis años ya se planta como un valiente sucesor de Nicolás Pieres (32).
Fotos: Candace Ferreira y Tucán Pereyra Iraola.
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