El verdadero motivo por el que Claire Liebaert le retiró la palabra a la infanta Cristina
La mamá de Iñaki Urdangarin ya no tiene vínculo con su ex nuera.
Durante más de dos décadas, la infanta Cristina fue mucho más que una nuera para Claire Liebaert. Para la madre de Iñaki Urdangarin, la hermana del rey Felipe VI representaba un nexo con la realeza y una figura familiar con la que tenía un sumo afecto. Sin embargo, esta relación se vio interrumpida por decisiones familiares y presiones internas.
Claire Liebaert vivió con entusiasmo la entrada de su hijo al entorno de la monarquía. En su momento, recibió la noticia del noviazgo con un entusiasmo exagerado y ver a Iñaki emparejado con una infanta de España era algo que ni en sus sueños más ambiciosos había contemplado. Años después, tras el matrimonio, los hijos en común y la convivencia con la familia Borbón, la relación entre ambas mujeres siguió creciendo.
Qué pasó con la relación entre Claire Liebaert y la Infanta Cristina
Pero con el tiempo llegaron los escándalos, la presión mediática y, finalmente, la ruptura. Y aunque el divorcio no supuso de inmediato el fin del vínculo entre Claire y Cristina, sí marcó el inicio de una etapa de tensiones. La relación se mantuvo, incluso de forma visible, con encuentros públicos que generaron incomodidad en su propio hijo.
Iñaki no ocultó su disgusto ante la cercanía de su madre con su exesposa, mientras intentaba asentar una nueva relación con Ainhoa Armentia, la mujer que había irrumpido en su vida sentimental tras la separación.
Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina
A diferencia de lo que sucedió con Cristina, Claire no logró establecer un lazo profundo con Armentia. Pese a algunos encuentros cordiales, la afinidad y la complicidad que compartía con la infanta nunca se replicaron. Esta diferencia, acentuada por el deseo expreso de Iñaki de que su madre priorizara la nueva etapa sentimental de su vida, terminó derivando en un distanciamiento obligado.
La última vez que se vio juntas a la infanta Cristina y Claire fue en el verano pasado, en Barcelona, durante un partido de Pablo Urdangarin. También coincidieron en la costa francesa, compartiendo algunos días de vacaciones. Desde entonces, la relación se volvió más discreta, reducida a llamadas esporádicas que tienen lugar cuando Iñaki no está presente.