sábado 27 de julio del 2024

CUANDO PORTARSE MAL ESTÁ BIEN: ALARMAS PARA DETECTAR PROBLEMAS EN LA ADOLESCENCIA

Llegada la adolescencia y el "ex-niño" debe utilizar mecanismos psicológicos nuevos indispensables para regular comportamientos/emociones. Si construyó recursos saludables, debe aprender a usarlos. Si no, la cuestión se complica ¿Cómo saber si nuestro hijo necesita ayuda profesional? Galería de fotosGalería de fotos

CREDITO CARAS

ALERTAS:

1. Falta de amigos (sin angustia). 

2. Falta de desarrollo de intereses nuevos.

3. Desinterés en amor/sexualidad (es la edad del enamoramiento intenso, ilusión, relaciones pegoteadas/tóxicas, la impulsividad, el sin-límite; y es lo saludable). 

4. Sobreadaptación. ¡Pasar a la secundaria trae emociones! Si lo transita sin afectividad alguna... ¡Ojo!

5. Cambios de apariencia "inmotivados". Es esperable que ingresando a una escuela nueva con gente nueva, idealicen, se copien y hagan cambios. Pero cuidado si los cambios provienen de su interior o de "ídolos". Puede significar que se refleja con nadie y está armándose sin lazos. 

6. "Preguntas filosóficas" oscuras. Es la etapa de cuestionamiento. Las preguntas que cuestionan al adulto/reglas está perfecto. Demuestran altruismo, idealismo (propio de la omnipotencia adolescente). Cuidado si las preguntas son existenciales/oscuras y nos dejan sin respuesta. ("¿para qué vivir si vamos a morir?"; "¿por qué vivir implica sufrir?"). Si el adulto se angustia es indicador de que algo está pasando. Esa visión cruda tempranamente puede superar sus recursos emocionales. 

7. Falta de recuerdos. Existe la "amnesia infantil" (por represión y otras operaciones). Pero cuando no recuerda nada puede indicar que no ha habido un aparato psíquico adecuado para registrar momentos. 

8. Falta de rechazo a los padres. El adolescente necesita "bajar" a sus padres del lugar de superioridad y para eso los alejan, los rechazan. Quieren estar solos. Si no se avergüenzan o se incomodan por ser llevados, traídos, vacacionar con ellos, etc., podría necesitar un empujón para crecer a tiempo. La adolescencia tiene su período de ventana. Demasiado apego es indicador de posibles patologías.

9. Agresividad:  Problemas de conducta que excedan la transgresión propia de la edad, ya son alarmas. No hablamos de que vuelva borracho de una fiesta porque no sabe tomar. Hablamos de fugas, deambulaciones, peleas "a las piñas" recurrentes, maltrato físico/verbal a la madre (principalmente), consumo de sustancias, etc.

10. Uso excesivo de videojuegos. Tienen potencial adictivo, obstaculizan el lazo social y alteran el sistema nervioso central, por lo que si el juego está puesto por encima de otras actividades, hay que tomar medidas.

La adolescencia es una etapa en la que se termina de construir la salud mental. Lo que pase determina muchísimo el futuro. Tenemos que trabajar en la prevención para no lamentarnos más adelante. No se trata de cambiar por dentro. El desafío es que los conflictos internos puedan resolverse internamente, con nuestros propios recursos, sin entrar en lucha con la realidad exterior. Como dijo Bryan White, "nunca crecemos, solo aprendemos cómo actuar en público".
 

Dra. Pía M. Roldán Viesti

Abogada T°92 F°959 CPACF

Psicóloga MN. 57.457 

Presidente y Fundadora de EUTI - (Asociación para la detección precoz de psicopatologías).

https://www.instagram.com/piamartina.ok/

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