Juan Ingaramo: “Violeta (Urtizberea) es tan sensible y poderosa que me impulsa a ser mejor”

Juan Ingaramo no sólo es una de las voces más reconocidas del pop argentino contemporáneo, también es un hombre profundamente enamorado. Así lo demostró en una íntima conversación con Héctor Maugeri en +Caras, el ciclo de entrevistas de Caras TV, donde el músico cordobés abrió su corazón para hablar no sólo de su presente artístico, sino también de su historia personal junto a Violeta Urtizberea, con quien comparte una relación de diez años y una hija en común, Lila.

“Me obliga a ser mejor persona, no es demagogia. Violeta es tan grosa en su inteligencia emocional y sensibilidad… ni hablar en lo profesional. Pero en esas variables me hace superarme, dejar atrás miserias para estar a la altura de Viole”, confesó con una mezcla de orgullo por su pareja y humildad para mejorar. 

En el mismo tono de sinceridad, el músico reveló que, incluso después de tantos años, sigue sintiendo la necesidad de reconquistar a su pareja. “Lo lindo del amor con ella es que siento que tengo que reconquistarla porque si no estoy a la altura, bye. No es un mandato ni un compromiso que dependa de otra cosa”, explicó.

La historia de amor de Juan Ingaramo y Violeta Urtizberea

Esa historia de amor tuvo su punto de partida muchos años atrás, cuando Juan la vio por primera vez en una revista. La imagen de Violeta le quedó grabada. El tiempo pasó y el destino hizo lo suyo. A través de amigos en común del ambiente artístico, Juan fue invitado a ver Isósceles, una obra en la que actuaba Violeta. Fue al verla allí, en esa función, donde se produjo lo que él mismo define como “un flechazo”. Después del teatro, compartieron una cena con amigos y aunque él intentó mostrarse relajado, confiesa con humor que la atracción le jugó en contra. “Se me caían los cubiertos, fue un papelón”, admitió con ternura.

Luego de enterarse que Violeta se había separado, Ingaramo decidió dar el paso. Le escribió un mensaje por Facebook, para invitarla a una cita. La propuesta: un encuentro a solas. Sin embargo, ella le sugirió sumar más amigos, algo que lejos de desalentarlo, terminó marcando el comienzo de su historia. “Fue el día de los enamorados, el 14 de febrero de 2015. Estaba marcado por el destino. Desde ese día no nos separamos más”.

En 2019, la pareja de artistas le dieron la bienvenida a Lila, una hija que, según Juan, le dio “algo que jamás sintió con el éxito”. Hoy, diez años después, los actores lograron construir un vínculo sólido, basado en el respeto mutuo, la admiración y una sensibilidad compartida. Y si algo dejó claro Juan en esta entrevista, es que el amor verdadero no se da por sentado: se cultiva, se cuida y se elige todos los días.

Con una carrera en ascenso —pronto protagonizará Pretty Woman, la versión argentina del clásico cinematográfico— y una vida familiar que lo inspira, Juan Ingaramo demuestra que se puede habitar el éxito sin perder de vista lo esencial: el amor que lo sostiene, lo desafía y lo convierte en una mejor versión de sí mismo.