Máxima Zorreguieta y Lady Di: qué las une y qué las diferencia

Máxima Zorreguieta, la argentina que se convirtió en la reina de Holanda, acaba de cumplir 50 años. Se trata de una de las monarcas más queridas y carismáticas de todas las casas reales en la actualidad. 

Muy pronto los autores Rodolfo Vera Calderón y Paula Galloni lanzarán su nuevo libro  "Máxima. La construcción de una reina", donde revelan varios detalles del pasado de Máxima antes de convertirse en la reina de Holanda. Estos autores, así como mucho del público que sigue las vidas de las distintas casas reales, no han podido evitar comparar a Máxima con otra figura rutilante en la historia de las monarquías: la princesa Lady Di. 

Entre ambas figuras se encuentran una serie de similitudes y de diferencias, tanto en sus personalidades como en sus orígenes, sus trayectorias personales y hasta en su glamour: al igual que Diana de Gales, Máxima ocupa un espacio en varias publicaciones de moda, donde aparecen sus fotos luciendo con elegancia distintos atuendos. 

Las similitudes y diferencias en la personalidad de Máxima Zorreguieta y Lady Diana Spencer

Una de las similitudes que hay entre Máxima y Lady Di es el compromiso con causas humanitarias. Recientemente, Máxima estuvo de viaje por África, donde visitó un centro de atención a mujeres embarazadas y a niños pequeños, en el marco del proyecto MomCare de PharmAccess.

La iniciativa,  a la cual Máxima estuvo muy vinculada, ofrece un paquete de atención digitalizado que vincula una tarjeta de seguro al teléfono móvil. Así, durante el embarazo se mantiene el contacto con la mujer y se recopilan datos que contribuyen a una mejor y más eficaz atención. Cabe destacar que, si bien en Tanzania existe la atención gratuita a mujeres embarazadas, la calidad de la sanidad pública no siempre es buena. 

Máxima no dudó en tomar en sus brazos a varios de los bebés nacidos en dicho contexto, imagen que recordó a las visitas de Lady Di en su última etapa, cuando se encontraba muy vinculada con los enfermos de SIDA y con los más pequeños. 

También, Diana estuvo muy comprometida con los enfermos de lepra en Indonesia. En 1989, durante un viaje que hizo por dicho país, fue reconocida como la patrona de La Misión de la lepra en Inglaterra y Gales, reconocimiento que llevó hasta su muerte. En Indonesia, las cámaras captaron el modo en que tocaba los ventajes de personas con lepra. Su objetivo era concientizar sobre que la cura existía desde 1981 y que no era una enfermedad altamente contagiosa, contrarrestando así cualquier segregación o marginación posible a los enfermos. 

En marzo de 2022, Máxima también visitó a la Cruz Roja del centro de convenciones Ámsterdam Rai, que se encontraba atendiendo a miles de refugiados ucranianos que venían escapando de la guerra. 

Pero más allá de lo humanitario, las similitudes y diferencias entre Máxima y Lady Di atraviesan otros campos. Ambas figuras son muy amadas por sus respectivos pueblos, pero mientras la corona británica no veía con buenos ojos la popularidad de Lady Di, la Casa de Orange viene de varios reinados de mujeres contribuyeron a cultivar una forma mucho más abierta y receptiva.

Además, el rey Guillermo de Holanda apoya plenamente a su consorte, y hasta disfruta que se robe la atención y las cámaras, en contraposición a Carlos de Inglaterra, a quien la personalidad de Lady Di lo ponía celoso por la atención que recibía.  

Además, mientras Lady Di sufría la exposición mediática, Máxima de Holanda la disfruta, y con su carisma y sonrisa se convirtió en la figura más querida de la realeza holandesa. 

Lo que es más: Máxima ha contribuido a fortalecer la imagen de su marido, a quien el pueblo lo denigraba y le ponía apodos a propósito de su afición a las fiestas y salidas, como también a su poca excelencia académica.