sábado 20 de abril del 2024

“Café Florecer” – Un grano de Café es un grano de Esperanza

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Durante el 2020 asistimos a un evento único que impactó en todos los mercados. Referido al mundo del café charlamos con Diogo Bianchi, conocido referente del mercado local e internacional para que nos cuente su opinión de los hechos y su visión para el 2021.

¿En qué estado se encuentra el mercado del café actualmente y que te animás a proyectar para el próximo año?

Ahora mismo hay una caída enorme del consumo debido a que recién después de siete meses se reactivaron los bares y hoy se habla de una pérdida del 40%. La contra-cara fue la venta doméstica de café en cuartos, aunque no alcanzó para balancear el negocio, aún con la ayuda del sistema take away. Lo que sí funcionó bien fue el producto en cápsulas. Además, hubo oportunidad para la creación de nuevas marcas o alianzas en búsqueda de otros mercados.

Lo que preocupa es el hecho de que gran cantidad de cafeterías que cerraron transitan graves problemas para volver a abrir, y muchas no lograron hacerlo. Eso también repercute en la caída del consumo. Por otro lado, aunque la gente tenga la posibilidad de salir un poco más a la calle y afrontar etapas menos restrictivas de distanciamiento, hay algo importante que se sumó y es la llegada del verano, un momento donde es normal que descienda la demanda de bebidas calientes, y solo las versiones frías pueden mover algo mínimo, pero la realidad es que no hay registros históricos de algún acontecimiento anterior de la misma gravedad.

Para este año 2021 claro que hay esperanzas de que todo vuelva, pero sabemos que será lento y que lo perdido difícilmente pueda recuperarse. A muchos les toca comenzar de nuevo. Yo particularmente una de las estrategias que adopté buscando sustentabilidad a corto y mediano plazo es apuntar a otro producto diferente e innovador, no únicamente café en granos y en otro mercado que no sea una cafetería. Encontrar otro tipo de público más amplio para relacionar el café con algo nuevo. Así nace hoy nuestra línea Beauty, que integra productos de cuidados personal a base de Café de Especialidad, buscando que nuevas personas lleguen al café de una manera novedosa.

Son desafíos que con capital y creatividad uno debe avanzar. Es diferente que enfocarse en un solo producto donde hoy existen muchas complicaciones y nuevas limitaciones.

Siendo el turismo el último sector en retomar actividad ¿Cómo se prepara la vuelta de Elena en Four Seasons?

Más de la mitad del público del Four Seasons es internacional, por tanto, necesitan al igual que toda la industria que el turismo retorne cuanto antes. Para que eso ocurra deben darse varios factores. En el caso del Restaurante Elena nosotros operamos como restaurante para un público pasante ejecutivo y local. Las toneladas de café que se usan por año alimenta a una cadena importante de producción que va desde el tostadero hasta el trabajador de la finca. El hotel hace un trabajo de responsabilidad social cuando compra a dos fincas puntuales, una en Brasil y otra en Etiopía.

¿Toda esta situación te enfrenta a nuevos desafíos en tu rol como formador?

La realidad es que hay mucha mano de obra desocupada en el mercado, constantemente me llegan pedidos directos por redes sociales. Cuando doy una clase ya sea en mis Clínicas y Talleres, en el Colegio Gato Dumas o en mi trabajo en ONGs lo que siempre remarco es lo importante de tener una mentalidad emprendedora, entender que más allá de saber hacer café, conocer su proceso o poseer el talento para comunicarse con el cliente debería convertirlo en más posibilidades. Es necesario estudiar la manera de monetizar esos talentos existentes o adquiridos. Lamentablemente la falla en la educación actual hace que se sigan formando futuros empleados y nunca se prepara para emprender, más en un contexto donde seguramente haya reducción de puestos de trabajo.

Si la idea es buena, única, si hay ganas y un buen plan, seguro será muy gratificante llegar a donde uno desea estar.

¿Qué te llevó a comprometerte en dos proyectos sociales?

Ya no tengo la ambiciosa idea de cambiar el mundo, me conformo con cambiar la realidad que me toca y la que me rodea. Sentí que es una manera de retribuir lo que aprendí en distintos momentos de mi vida y así fue que empecé a enseñar en la Fundación Casa de Galilea, en San Isidro. Siempre con la misión de desarrollar las posibilidades de cada persona. No es para nada fácil porque el entorno tiene mucho que ver, y también el lugar desde donde se parte. Al mismo tiempo estoy convencido que un oficio es una oportunidad de oro para capitalizar y ver un cambio de vida.

En el caso de ASOCIAR el proyecto con Roberto García Moritan es distinto, allí Café Florecer es de responsabilidad socio productiva. Buscamos potenciar el trabajo de la ONG en los barrios más vulnerables de Buenos Aires a través de productos sustentables. Yo me comprometo a poner el capital de trabajo, la infraestructura de los futuros locales, capacitar a jóvenes y adultos sin discriminar la edad, género o grado de formación educacional, contratar personas de los barrios vulnerables cercanos e integrarlos en dicho proyecto.

Es fundamental lograr en la capacitación impregnar ese sentido de pertenencia porque el verdadero desarrollo se dará a través de la educación y del trabajo.

Una segunda instancia del programa es crear centros estratégicos en el AMBA que demanden la producción de los productos e insumos utilizados en los locales de FLORECER. Nos encargaremos de monitorear cada uno de los puntos, ya que se viven realidades distintas en cada uno, pero creemos que ese es el camino para ayudar las comunidades vulnerables a tener una formación de valores sociales, cultura de trabajo e inclusión cívica.

Conocé más sobre los proyectos en: @diogo.bianchi - @arabicca.coffee - @cafeflorecer // Producción: @vlack_sd - Nota: @maxialejandrom - Fotos: @phflorenramirez

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