¿Cuándo una persona debe consultar?
Cuando (sola/o o en pareja) detecta que sus relaciones sexuales son insatisfactorias por alguna disfunción concreta (falta de control eyaculatorio, dificultad en llegar al orgasmo, bajo deseo sexual, dolor en el coito, perdida de erección y otras) o bien porque sienten disconformidad o malestar. Sugiero consultar siempre que la vivencia de la sexualidad les impida disfrutarla libremente y de forma saludable. La terapia sexual no solo es reparadora, sino también una herramienta para incrementar el placer, las emociones, la comunicación e incluso la autoestima y habilidades sociales más adecuadas.
¿Consultan más hombres o mujeres?
Las mujeres suelen pedir ayuda antes (prepondera la consulta sobre escaso deseo sexual y dificultades en alcanzar el orgasmo) pero cuando un varón aparece en consulta tiene claro que quiere solucionar su problema (prioritariamente eyaculación precoz y dificultad en lograr o mantener la erección) y se compromete mucho.
Es importante que los dos miembros se involucren, independientemente de quién de los dos tenga el síntoma o disfunción.
¿Con qué expectativas consultan?
Las parejas que asisten a terapia sexual, en ciertos casos, ya han intentado múltiples estrategias o han esperado demasiado tiempo y aparecen en la consulta como último recurso y a veces al filo de la separación.
Cuando entienden que son ellos los responsables de su ‘curación’ y que implicarse incluye cambiar algunas otras conductas, no solo sexuales; se sienten sorprendidos y a veces ansiosos porque creían que mágicamente con mínimos cambios o algunos consejos, se resolverían problemas que llevaban años enquistados y metidos debajo la alfombra.
¿Cuál consideras que es tu diferencial como profesional?
Me caracteriza la ética, seriedad, responsabilidad, compromiso y la calidez humana. Les expongo a mis pacientes todo sobre la sexualidad sin tecnicismos, ya que a veces vienen con vergüenza, con vivencias negativas y culpabilizadoras, y al hablarles claro y sencillo, los ayudo a soltarse.
¿Como acompañas a las personas en dichos procesos?
Entre paciente y terapeuta se trazará un plan concreto que facilite las estrategias para que los síntomas desaparezcan o disminuyan. Pero también, para que cada uno conozca mejor sus deseos y gustos, para saber cómo comunicárselos al otro miembro y establezcan juntos sus necesidades propias. Por ejemplo, priorizar la calidad y la satisfacción o el placer que los dos miembros se prodigan mutuamente en lugar del número de coitos per se. Ya que escaseó una educación sexual adecuada, sugiero que toda persona que desee mejorar su sexualidad acuda a una consulta sexológica.
Hoy por hoy al estar trabajando, además, por videollamadas puedo brindar atención a personas (de cualquier lugar del país y del mundo) que necesiten ser asesoradas, y ayudarlas en la resolución de cualquier tipo de dificultad sexual y de pareja que pueda surgir a cualquier altura de su ciclo vital.
La terapia sexual es un proceso y cada uno/a necesita su tiempo. Pero lo importante es que nunca es tarde y siempre se pueden mejorar las habilidades sexuales y/o corregir lo que nos trae displacer. Y ese es mi trabajo, ayudarlos a erotizar los estímulos, los sentidos, el cuerpo…
Datos de contacto: Carina Garnica - Psicóloga y Sexóloga Clínica - Rosario, Provincia de Santa Fe - Matricula: 2144 // Tel: 54 341 3 241296 - IG: @doctorage