Escucha Activa: Una Herramienta Clave para Conectar con los Demás

¿Qué es la escucha activa?

Aunque muchas veces pensamos que escuchar es algo simple, esta habilidad requiere atención consciente y empatía para lograr una conexión auténtica con el otro.

Mitos sobre la escucha

1. Escuchar para discutir o argumentar:
   Cuando solo oímos para responder o imponer nuestra opinión, nos alejamos de la escucha activa. Escuchar no es un paso previo al debate, sino una oportunidad para comprender.
2. Escuchar para dar soluciones:
   Muchas veces nos adelantamos, queriendo resolver el problema antes de entenderlo. Esto nos lleva a ignorar la perspectiva de la otra persona.
3. Escuchar para animar:
   Frases como "no llores", "no te enojes" o "todo estará bien" pueden invalidar las emociones de quien nos habla, aunque tengan una intención positiva.

¿Qué es realmente la escucha activa?

Es la capacidad de estar presente, prestando atención plena y tratando de comprender no solo lo que la otra persona dice, sino también lo que siente. Implica suspender nuestro juicio para mirar desde su perspectiva.

Consejos para practicar la escucha activa

• Establece contacto visual: Mirar a la persona con atención demuestra interés y cercanía.
• Evita interrumpir: Escucha todo el relato antes de hablar. Esto te permitirá procesar la información y retroalimentar de manera efectiva con preguntas como: "¿Entendí bien?" o "¿Dijiste que te sentiste mal por esa respuesta?".
• Refleja las emociones: Al identificar y validar lo que la otra persona siente, generas confianza y fortaleces la conexión.
• Consulta antes de ofrecer ayuda: Pregunta si la otra persona desea recibir apoyo, permitiéndole decidir y respetando su autonomía.

La escucha activa es más que una técnica; es una práctica que transforma la manera en que nos relacionamos con los demás, fomentando empatía y entendimiento mutuo.

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Instagram: @chika.bela