Así crecen los hijos de Abel Pintos y Mora Calabrese: vida sencilla, naturaleza y la familia como prioridad

Abel Pintos eligió alejarse de la exposición constante para abrazar una vida donde lo esencial cobra protagonismo. Junto a Mora Calabrese, construyó un entorno en el que la infancia de sus hijos transcurre entre afectos reales, rutinas sencillas junto a su familia y una fuerte conexión con lo natural.

Así están hoy los hijos de Abel Pintos y Mora Calabrese

Abel Pintos encontró su equilibrio lejos del ruido y cerca de lo que realmente importa: la familia, la tierra y los afectos cotidianos. Con Mora Calabrese a su lado, comparte una crianza guiada por el contacto con la naturaleza y una mirada amorosa sobre la vida. Allí, en un rincón donde prima lo simple, sus hijos crecen con raíces firmes y un mundo hecho a medida del amor verdadero.

Desde su hogar en Resistencia, Chaco, la pareja construyó un refugio familiar donde sus hijos crecen rodeados de verde y con valores que priorizan el amor, la conexión y la sencillez. La familia está compuesta por Guillermina, hija de la empresaria, Agustín, nacido en 2020, y la pequeña Rosario, que llegó al mundo en 2024.

Cada uno de ellos ocupan un lugar central en la vida del cantante, quien no duda en compartir en sus redes sociales momentos de ternura, juegos y cotidianeidad. “16 años haciendo de nuestro mundo un lugar mágico. Te amo tamaño cielo, hija”, escribió Abel Pintos en una historia de Instagram dedicada a Guillermina Calabrese.

La casa familiar, ubicada en una zona tranquila de Resistencia, es un verdadero oasis. Con una decoración minimalista y funcional, los espacios están pensados para el disfrute compartido. La cocina, por ejemplo, es uno de los rincones favoritos del músico, quien se mostró en más de una ocasión cocinando o pasando tiempo con sus hijos allí.

“Encontré mi lugar para vivir de la mejor manera”, confesó el artista en una entrevista reciente. En el Chaco, Abel Pintos no solo encontró el amor, sino también un entorno donde puede crear, componer y, sobre todo, ver crecer a sus hijos en libertad. La crianza que eligieron para los menores está profundamente conectada con la naturaleza. Las caminatas por el jardín, el contacto con la tierra y los juegos sin pantallas son parte del día a día.

Además, la pareja sabe cómo equilibrar la vida pública con la privacidad. Aunque el artista cuenta con más de dos millones de seguidores en Instagram, sus publicaciones familiares son cuidadas, íntimas y siempre con un mensaje de amor. Mora, por su parte, también comparte momentos de maternidad y reflexiones personales, consolidando una imagen de familia real, cercana y sin artificios.

Así, entre costumbres simples, un entorno donde la naturaleza marca el pulso cotidiano y el sostén incondicional de los vínculos familiares, los hijos de Abel Pintos y Mora Calabrese crecen inmersos en una forma de vida que prioriza lo esencial.

VDV