La desgarradora historia de Inesita, de Betty la fea: del éxito a la despedida en soledad

Dora Cadavid, la actriz que dio vida a la entrañable Inesita en la icónica telenovela Yo soy Betty, la fea, vivió una vida marcada por el éxito profesional y las tragedias personales. Su historia, llena de luces y sombras, refleja la complejidad de una carrera artística que dejó una huella relevante en la televisión latinoamericana.

Nacida el 23 de noviembre de 1937 en Medellín, Colombia, Dora Cadavid inició su carrera en el mundo del entretenimiento como locutora y presentadora en Radio Santander de Bucaramanga. Su talento la llevó a Bogotá, donde debutó en televisión bajo la dirección de Bernardo Romero Lozano. A lo largo de más de cinco décadas, participó en producciones emblemáticas como Café con aroma de mujer, Romeo y Buseta y La Teacher de inglés. Sin embargo, fue su papel como Inés Ramírez, la leal asistente del diseñador Hugo Lombardi y miembro del "Cuartel de las feas", el que la catapultó al reconocimiento internacional. Su interpretación de Inesita, una mujer sabia y maternal, conquistó a millones de espectadores y se convirtió en uno de los personajes más queridos de la telenovela.

La desgarradora historia de Dora Cadavid, la actriz de Inesita en Yo soy Betty, la fea

Detrás de las cámaras, la vida de Dora estuvo marcada por profundas pérdidas. En 2012, sufrió la muerte de su único hijo, Moisés Cadavid, también actor, a causa de un cáncer de páncreas. Esta tragedia la afectó profundamente, llevándola a retirarse progresivamente del medio artístico. Buscando tranquilidad y dignidad, decidió internarse voluntariamente en un hogar geriátrico, donde vivió sus últimos años acompañada por cuidadores y algunos familiares.

El 31 de enero de 2022, Dora Cadavid falleció a los 84 años debido a complicaciones respiratorias. Su partida fue profundamente sentida por el público colombiano y por quienes crecieron viéndola en la pantalla. A pesar de su retiro, el cariño y la admiración del público y sus colegas permanecieron intactos.

La historia de Dora Cadavid es un reflejo de cómo, incluso tras las luces del escenario, hasta los artistas más queridos enfrentan batallas personales lejos del reconocimiento. La memoria de la actriz perdura en su legado, y la Inesita que vimos en 'Betty, la fea' seguirá siendo símbolo de ternura y sabiduría en la historia de la televisión latina.

F.A