Desde hace más de tres décadas, Mario Pasik es uno de los referentes de la televisión y el teatro argentino, sus personajes de villanos, de héroes y hasta cómicos como en "Pan Caliente", tira de los años '90 han deleitado al público quien siempre lo premio con su cariño y sus aplausos. En esta oportunidad, el interprete brindó una nota radial en la que reveló que tiene contacto permanente con su hermano, el querido Salo Pasik quien falleció el 3 de enero de 2017.
En una entrevista con Juan Etchegoyen en “Mitre Live“, (lunes a viernes a las 17 por el Instagram de Radio Mitre), el actor relató las señales que recibe todo el tiempo de su familiar: "Lo tengo a Salo conmigo. No es que me ponga a hablar con él pero de alguna manera es un diálogo que se modifica. No hemos tenido a lo largo de la vida una relación de enfrentamiento pero teníamos distintos grupos de pertenencia. Pese a que algunos coincidían. Hemos trabajado mucho juntos”, comenzó relatando Mario.
“Sumó una más alta presencia esa hermandad cuando mi mamá empezó a despedirse. Coincidíamos. Esto fue a los años del fallecimiento de mi padre, tuvimos oportunidad de tener charlas para poder hacer balances e intercambios de figuritas. Uno toma cosas que son llamativas. Una vez me pasó en la calle, yo estaba haciendo “los martes orquídeas”. En la esquina del teatro había un café. Y yendo hacia ahí me paró una persona que vendía películas. Me dijo que veía mis novelas. Me felicitó por mi trabajo. Y al minuto me estaba hablando de Salo pero mucho me hablaba de él“, dijo...
Siguiendo con su testimonio, Pasik manifestó: “Yo la miraba. Me dijo que le había hecho bien escuchar un par de reportajes míos donde hablé de mi hermano. Él había estado en la India y era seguidor de Sai Baba. Y a la mujer le había afectado mucho y le había hecho bien verlo. Después de quince minutos que esta mujer me hablaba, empecé a mirar para arribar y dije ´estás´“.
“Son esas maneras y esas formas. Además, la coincidencia de estar trabajando de lo mismo. Si hablo con vos y habló de Salo no hablo de un hermano que no conocen la cara. Despertó mucho afecto y admiración. Me encuentro permanentemente con él. En este reportaje por ejemplo. Es inevitable y maravilloso también”