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Meghan Markle ha restringido el contacto de sus hijos, Archie y Lilibet, con su abuelo, el rey Carlos III, a videollamadas semanales de solo 10 minutos. La última vez que el rey vio a sus nietos en persona fue en 2022, durante el Jubileo de Platino de la reina Isabel II. Desde entonces, la distancia entre California y Londres ha dificultado las interacciones.
Fuentes cercanas al rey Carlos afirman que él está comprometido a mantener una relación cercana con sus nietos, pese a las tensiones con los Sussex. Aunque Meghan ha impuesto estas restricciones, el monarca ha dejado claro que Archie y Lilibet siempre serán bienvenidos en la Familia Real.
Meghan Markle no quiere que el rey Carlos III profundice el vínculo con sus hijos
El cumpleaños reciente de Lilibet destacó la distancia entre los duques de Sussex y la Familia Real, ya que no recibió felicitaciones públicas de la monarquía, siguiendo la política de Carlos III de limitar estos mensajes a miembros activos. A pesar de las restricciones, el rey se comunicó con la niña mediante una videollamada y le envió un regalo y una tarjeta.
Desde el entorno de Harry, se insiste en que el rey siempre tiene la puerta abierta para visitarlos en California, aunque las reglas impuestas por Meghan Markle dificultan cualquier acercamiento significativo, ya que no quiere que sus retoños profundicen el vínculo con su abuelo.
AM
