En 2007 Evan Rachel Wood fue la protagonista del videoclip de la canción "Heart-Shaped Glasses" de Marilyn Manson. Mientras que el tema es uno de los más importantes del rockero, para la actriz es el recuerdo latente del mismísimo infierno.
"Habíamos discutido una escena de sexo simulada. Pero una vez que las cámaras estaban rodando, comenzó a penetrarme de verdad. Nunca accedí a eso", dijo la actriz en el documental de HBO "Phoenix Rising", que se estrenó en el festival de cine de Sundance.
Wood y Manson salieron en 2006, cuando ella tenía solo 18 años y él 37; y, según él mismo reveló, la canción estaba inspirada en la imagen de Wood usando las gafas con forma de corazón que se hicieron famosas en el póster de la película "Lolita", de Stanley Kubrick.
"No sabía cómo defenderme ni sabía cómo decir que no, porque me habían condicionado y entrenado para no responder nunca, solo para seguir adelante. Me di cuenta de que el equipo estaba muy incómodo y nadie sabía qué hacer", prosiguió la actriz sobre el traumático hecho que vivió.
"Fui forzada a participar en un acto sexual comercial con falsos pretextos... Básicamente, me violaron frente a la cámara", concluyó.
Según el documental, que repasa los esfuerzos de Wood y otras sobrevivientes de abusos sexuales para extender el plazo de prescripción de estos delitos y disponer de más tiempo para buscar justicia después del abuso, Manson presionó a Wood para que les dijera a los periodistas que no había habido sexo real durante la filmación del video.
"De todas las falsas acusaciones que Evan Rachel Wood ha hecho sobre Brian Warner, su recuento imaginario del rodaje del video de 'Heart-Shaped Glasses' hace 15 años es la más descarada y fácil de refutar porque había varios testigos", escribió Howard King, abogado del cantante.
Por el momento, Marilyn Manson sigue sin hacer declaraciones.