El príncipe Guillermo está abocado de lleno a la causa por el coronavirus, lo que le significó ser el representante de la Corona y, junto a su mujer, Kate Middleton, se convirtieron en "las estrellas" de la Familia Real. La pareja es la mimada de la Reina Isabel, y fue a ellos a quienes la monarca les fue delegando sus funciones, a medida que veía la respuesta favorable del matrimonio.
El hijo mayor de Carlos puso toda su responsabilidad, y al mismo tiempo le dio protección a su esposa para que no tenga la vida infeliz en el palacio que sufrió su madre, Lady Diana Spencer.
Por eso, y sabiendo que "desde que una persona entra en la vida de los Windsor pasa a ser de los Windsor", William le prometió antes del casamiento que nunca la alejaría de su familia de origen.
Y es así como ellos y sus hijos están muy unidos a los Middleton, con quienes vacacionan juntos y muchas veces fueron a pasar los veranos a la lujosa mansión que tienen en el Caribe.