Dice que el reto es parte del disfrute y que en su nuevo rol de conductora, ningún día se parece a otro. Algo de eso, además de su inminente vuelta al teatro, explica la iluminada sonrisa de Iliana Calabró (55). “Llevamos un tiempo largo ensayando y, por suerte, pronto volveremos a ver al público en la sala que lo necesitamos a gritos. Hacer un programa diario ya es muy demandante y si a eso le sumo que termino y vengo directo a los ensayos, es un montón pero vale la pena”, reconoce previo al debut de la comedia “Díganlo con Mímica” en el Multiteatro y cada vez más aceitada en la conducción de “Buen Plan”, el magazine vespertino de Net TV que promueve el bienestar.
“Quizá en el cotidiano no te das cuenta, pero a medida que pasan los programas notas cómo algo que te costaba o intimidaba después comienza a hacerse habitual, yo igual nunca lo padecí y siempre me fue muy natural para mí. Creo que todos los días es una experiencia distinta, el fogueo diario de estar al frente lista y preparada, con distintos temas, pensando qué es de interés para el otro. La vida saludable, alimentos, medicina, estética, ejercicio, yoga, moda, todo eso requiere una preparación para estar a la altura de la entrevista y los profesionales que nos acompañan. Son temas súper interesantes, que tienen que ver con entretener pero a la vez acercar a la gente a una mejor calidad de vida, al bienestar, a la salud y la armonía, sobre todo después de esta pandemia que tanto nos hizo replantearnos”, detalla Calabró.
Y completa: “Es un equipo que se fue formando de a poquito y está cada vez más sólido. En un canal nuevo donde todo se hace mucho a pulmón, desde el cámara que es su primera vez, asistentes, productores y es un equipo muy joven, muy nuevo y con muchas ganas de estar a la altura para que se vea un producto sólido y poco a poco lo venimos logrando. Acercarse también a los emprendedores que con esfuerzo llevan adelante una pyme o emprendimiento, porque es un ciclo con mucho contenido. Y agradecida, por supuesto, a su productora Liliana Castaño, que pensó lo que yo hace muchos años tenía ganas de llevar adelante, un producto que se ocupe del estilo de vida, esas cosas que pueden mejorarnos no solo internamente, sino con el entorno”.
Pero el aprendizaje mayor, asegura, no es solo es su entrenamiento televisivo. “Más allá de los profesionales que me rodean, como mi co-equiper Fabián Paz, un compañero maravilloso con el que aprendo y me aggiorno todos los días sobre nuevas tendencias y formas de lenguaje en la moda, tengo la posibilidad de indagar en distintos temas que quizá tocas de oído y que profundizándolos se hacen interesantes, en lo personal hasta modifiqué todas mis rutinas, sobre todo de alimentación. ¿A quién no le gusta estar mejor?”, plantea Iliana que con entusiasmo comparte cuáles son sus nuevos aliados saludables en las comidas.
“El contacto con los superalimentos y encontrar energía ahí, es algo que desconocía. Otros los usaba en la cocina sin saber de sus propiedades curativas, antioxidantes, relajantes. La kombucha, por ejemplo, no sabía ni de qué se trataba y ahora arranco todos los días con eso, que es un hongo que el que llega a mi casa puede dar fe que tengo un placard que parece un laboratorio lleno de frascos, con estos hongos flotando en distinto estado de composición. (Risas) Mi alacena siempre estuvo llena de cosas pero variedad y cantidad de especias o optar por la azúcar mascabo es nuevo para mí. Jugos detox, los arándanos y sus atributos, la espirulina que todos los días desayuno, los tés relajantes, mascaras naturales, ¡Yo pruebo todo!. También empecé a utilizar el feng shui para cambiar la energía de la casa, renovarlas y cómo supuestamente se puede atraer la pareja. Todavía el de la pareja no me dio resultado. Pero los tiempos de Dios no son los tiempos de uno”, comenta con humor. Con ganas de enamorarse pero a su tiempo, no se precipita y confía en lo que vendrá. “Ahora lamentablemente mucho tiempo no tengo, ni resto para salir, porque no veo la hora de llegar a mi casa, sacarme el maquillaje y disfrutar de mi única terapia que es disfrutar de una película o serie hasta que me quede dormida. Pienso que cuando venga el calorcito, que uno está con otra energía sin estar tan cargada, estaré más libre. Pero ahora que la cosa se abrió y con todo ya encaminado, sí tengo ganas y me gustaría poder darme ese tiempo para salir y conocer gente. Yo creo mucho en el espontáneo, que se de o que no se de. Pero nunca soy de ir a buscar porque creo que siempre te puede sorprender, como ya me ha pasado”, concluye motivada por su gran presente.