Así es la casa de Guillermo Andino y Carolina Prat que la modelo diseñó para su familia

Guillermo Andino y Carolina Prat construyeron una familia unida, que no duda en pasar momentos importantes como viajes, cumpleaños o recibidas. Sin embargo, para que todo eso se lleve a cabo en la tranquilidad del hogar, la modelo demostró su otra pasión por el diseño de interiores. Con una idea clara y buscando la comodidad de sus hijos y esposo, Prat diseñó su casa en Martínez, con pileta y estilo rústico, que muchos, con el tiempo, decidieron imitar. 

La casa de Guillermo Andino y Carolina Prat que la modelo diseñó para su familia

Guillermo Andino y Carolina Prat construyeron "la casa de los suspiros", un diseño de la modelo, en dos terrenos de Martínez, cerca de Libertador. En una entrevista con Canal de la Ciudad, ella contó que encontraron los "terrenos vírgenes" que aún conservan la flora de su dueño anterior. Rodeada de una gran pared de madera, el hogar maneja un estilo rústico, y presenta todas las comodidades de un gran patio, una pileta para el verano, un quincho con parrilla y ventanales enormes que los conectan con la naturaleza. 

En el exterior, la familia de Andino y Prat pueden disfrutar de un patio con mueblería de madera para poder sentarse en el aire libre. Para mayor diversión, lo acompañaron de diversos juegos, y un techo donde tienen la parrilla para cocinar y comer los domingos. Carolina se dio su espacio para poner algunos lugares solo para ella, donde puede cuidar a sus plantas y continuar con su estilo campestre. En todo el terreno, se pueden disfrutar de esculturas religiosas o conectadas con las energías, que le dan un estilo relajante al lugar. En esa misma entrevista, ella explicó: "Traté de que fuera con piedra, vidrio, líneas rectas, que se pudiese con el tiempo mantener y a lo sumo reciclar un poquito. Me gusta mucho el diseño de interiores". 

En el interior, se desplegan muchas habitaciones que le permiten a cada uno llevar sus actividades favoritas. Una puerta doble y de diseño antiguo da paso al living y comedor, que están conectados con el patio, a través de grandes ventanales, y les permiten estar abrigados gracias a un hogar de leña que lo prenden siempre que pueden. En la cocina, también se puede disfrutar del paisaje, pero mantiene un espacio más cerrado, con grandes mesadas para que Prat pueda hacer todas sus recetas favoritas. Ella se creó un estudio privado, donde puede explotar su arte; mientras que él tiene una habitación secreta denominada "Andinolandia", donde hay un museo infantil donde colecciona juguetes.

La decoración se maneja entre tonalidades rústicas, destacando el marrón de la madera y los cristales de los vidrios y lámparas colgantes. Con sillones blancos y paredes de piedra, la casa tiene una particularidad que sorprendió a todos: el piso tiene cubiertos incrustados que le da originalidad al diseño. El mismo fue idea de Carolina Prat, y Guillermo Andino reveló que enamoró a muchos, que luego decidieron imitarlo. "La casa de los suspiros" se llamó así, ya que ellos lo consideran esencial en su relación, demostrando que, a pesar de los años, siguen suspirando por el otro cada vez que se ven.

A.E