viernes 26 de abril del 2024

Pía Martina: Las mujeres ya no lloran…

ESPACIO NO EDITORIAL - CARAS LIKE

Si es cuestión de confesar, lloramos. Freud dijo: que el primer hombre que utilizó palabras en vez de agredir, creó la civilización. Llorar o quejarse son formas de expresar sufrimiento. Soportar la angustia no es para novatos.

Robert Smith cantó “Boys don´t cry”, como quien dice “callar las emociones es camino para fuertes ("los chicos"). Pero de 1979 a 2023 pasó mucho tiempo.

A pesar del movimiento contra los estereotipos de género, expresar emociones sigue estando mal visto. Tanto debate y “la pica” entre cómo debe manifestarse cada género parece eterna.  

Pero vamos al grano.

Llorar es un modo de atravesar el sufrimiento. También hay otros, como la canalizar lo problemático convirtiéndolo en una creaciones.

Las personas padecemos las pérdidas. Elegir un camino siempre implica abandonar otros. Y en ese trabajo que hacemos para despedirnos, los recursos son muchísimos. Algunos escriben canciones, otros hacen deporte, otros se mudan. ¡Y otros lloran!

Ocultar el dolor no implica fortaleza o valentía. Lo mínimo que debe permitirse alguien que sufre es lanzar un grito de dolor. A veces “melódico”… y hasta alegre. Dependerá de la inteligencia emocional, el ingenio y hasta el humor.

El levantamiento de muchas voces cantando al unísono siempre hizo historia. Propongo “un canto” sobre el permiso para conectarnos con nuestras emociones y sensibilidad, pero de una manera diferente. Expresar emociones no es sinónimo de debilidad.

Es verdad; las mujeres ya no lloramos necesariamente, pero nos expresamos. Frente a una pérdida, en consultorio aprendí que es mejor, cuando hay que hablar de dos, empezar por uno mismo…

No siempre manifestar dolor termina en “melodía triste”. Los procesos de recuperación por una pérdida son sanos cuando permiten lo que comenta Freud:

Quitar lentamente el interés por lo que perdimos, sin negar lo que pasó.

Sentir al mundo vacío momentáneamente, sin sentir que el yo está vaciado hasta de dolor.

Sentir culpa por estar mal (querer sobreponerse) por lo que intentar atravesar la situación sublimando, por ejemplo, es saludable.

Así evitamos los duelos patológicos. Callar, llorar sin usar palabras y avergonzarnos de sentimientos verdaderos, enferma. Es por nuestra salud que nos permitimos sentir el dolor. Seguir amándonos es inevitable…

¿Cerramos? Neruda, hombre, en 1924, escribió “despechado” a Albertina: “Aunque éste sea el último dolor que ella me causa, y estos sean los últimos versos que yo le escribo"... ¿Ven? Ya está. ¡Chau!



Dra. Pía M. Roldán Viesti

Abogada T°92 F°959 CPACF

Psicóloga MN. 57.457

Presidente y Fundadora de EUTI

 

https://www.instagram.com/piamartina.ok/

https://www.eutisalud.com/

[email protected]

Galería de imágenes
En esta Nota