El fin de semana el programa español, Socialité, conducido por María Patiño reveló que la mansión de Barcelona, que era de Shakira y Gerard Piqué está a la venta por 14 millones de euros.
La mansión que era de Shakira y Gerard Piqué está ubicada en Esplugues de LLobregat, una zona muy prestigiosa de Barcelona. Actualmente, la propiedad está bajo la titularidad de una de las empresas de Joan Piqué Rovira, padre del barcelonés.
Quisimos saber cuánto tiempo debería trabajar un argentino promedio si quiere llegar a comparar la mansión avaluada en 14 millones de euros y el tiempo es colosal y se escaparía del sueño una persona trabajadora de clase media en el país.
Tuvimos en cuenta el valor del euro oficial que está en un promedio de los 240 pesos argentinos al momento de la consulta, y comparamos el sueldo básico legal de un trabajador promedio en Argentina, que trabaja 48 horas a la semana y gana al mes el salario mínimo oficial de 80.342 pesos.
Según la operación matemática, una persona del promedio argentino que gane al mes, hoy, 80.342 pesos, deberá trabajar 3480 años para poder comprar, hipotéticamente, la casa en la que Gerard Piqué le fue infiel a Shakira.
La Organización Panamericana de la Salud indica que en Argentina tenemos el promedio de vida de 76 años; es decir, que si vamos al lado de la metafísica y le damos un tinte más místico a estas cifras matemáticas, se necesitan más de 45 vidas para poder comparar la casa de Shakira y Gerard Pique.
Qué dijo Shakira tras irse de Barcelona
El pasado primero de abril Shakira dejó la mansión en Barcelona donde había construído su hogar con Gerard Piqué y sus dos hijos, Milan y Sasha.
Antes de arribar a Miami, la mansión en la que vivió como soltera, la colombiana se despidió de Barcelona con unas palabras en Instagram.
Me establecí en Barcelona para darle una estabilidad a mis hijos, la misma que ahora buscamos en otro rincón del mundo al lado de familia, amigos y el mar. Hoy iniciamos un nuevo capítulo en la búsqueda de su felicidad. Gracias a todos los que surfearon junto a mi tantas olas allí en Barcelona, la ciudad en la que aprendí que sin duda la amistad es más larga que el amor”, dice la primera parte.
“Gracias a todos los que allí me animaron, secaron mis lágrimas, me inspiraron y me hicieron crecer. Gracias a mi público español que me ha arropado siempre con su cariño y lealtad. Para ustedes solo un hasta luego y como decía tantas veces mi padre, ¡nos vemos en las curvas!”, cerró Shakira en su posteo de despido con una foto panorámica de la vista de la mansión.