Es cierto que “Argentina, 1985” no ganó el Oscar a la Mejor Película Extranjera (lo obtuvo el filme alemán “Sin novedad en el frente”). Esta vez no éramos los favoritos, aunque las ilusiones eran muchas. Ricardo Darín le concedió a CARAS una entrevista desde Los Ángeles y expresó un análisis muy positivo de lo ocurrido con el filme dirigido por Santiago Mitre.
—¿Qué balance hace? No obtener la estatuilla generó una sensación de que... “Nos faltó la Frutilla del Postre”.
—Hicimos un camino glorioso: ganamos el Goya, el Golden Globe, recibimos premios por todos lados. El público adoró a la película. No siento que hayamos perdido nada. Perdimos la posibilidad de obtener el Oscar, pero la verdad es que es mucho lo que ganamos. El camino que ha hecho esta película, acompañado por nosotros, y la generosidad que tuvo el filme, con la cantidad de premios y valoraciones que recibió en todo el mundo, no habla para nada de un resultado de pérdida. Más bien, te diría, es una sensación de ganancia. No nos tocó ganar el Oscar y ya está: ¡No pasa nada! Pero mi sensación es que hemos ganado mucho: en experiencia, en contactos, aprendimos bastante en este camino.
—¿Considera que, a pesar de que no se ganó el Oscar, igualmente fue un triunfo del cine argentino?
—No sé si es un triunfo del cine argentino, pero es un “gran empujón”. Nuestro cine en el mundo, con situaciones como la que vivimos con esta película... Y no sólo con esta, con otras de otros colegas también, dejan la vara muy alta. Hoy en día hablás de cine argentino y todo el mundo presta un poco de atención. O sea que, pensándolo de esta manera, la respuesta sería: sí, se puede considerar como un triunfo del cine argentino.
—¿Cómo se pasa de la expectativa que se había creado de ganar el Tercer Oscar del cine nacional a la aceptación de esta realidad?
—Nosotros manejamos un nivel de expectativa acorde a lo que creíamos que podía pasar. Y por eso no nos sorprendió tanto, porque veíamos que en las últimas semanas, la película alemana venía pisando muy fuerte. Tuvo un gran apoyo por parte de la empresa patrocinante y creo que eso también marcó la diferencia. Pero nosotros la hemos pasado tan bien haciendo todo esto, hemos recogido tantos halagos y una experiencia tan vasta que, insisto, sigo con la sensación de que hemos ganado muchísimo. Hay que aceptar la realidad y la realidad es que no salimos ganadores nosotros. Pero no más que eso. No nos podemos olvidar de todo lo anterior, que para mí es lo más fuerte… Claro que, por supuesto, ganar el Oscar hubiera sido un “Cierre de Campaña” extraordinario. A lo mejor estábamos esperando demasiado. Pero está muy bien lo que se hizo, lo que se consiguió y la satisfacción del trabajo realizado.