Dalma Maradona renunció a su programa "Un día perfecto" de radio en Metro y compartió un contundente mensaje de despedida, que también destapó el trasfondo de su salid.
"La semana pasada fue mi último programa y les quiero pedir disculpas a los oyentes por no haberlo podido comunicar antes, ¡claramente no fue una decisión mía, pero bueno!", lanzó la actriz dando cuenta de que la situación no fue la mejor.
"Solo para que entiendan un poco ya después de mi segundo embarazo las cosas en la radio fueron muy desprolijas conmigo, rozando la falta de respeto, pero por amor a mi equipo (ellos saben que fue solo por eso) y las charlas con Jime y Caye me quede un poco más! Yo volvía de mi licencia a trabajar como correspondía, pero los planes en esta radio para mi eran otros", continuó Dalma, dando cuenta de la situación que tuvo que atravesar.
Por último, la hija de Diego Maradona no se quiso quedar con lo malo y agradeció a las personas que la bancaron: "Sacando la parte fea quiero agradecerles de todo corazón el cariño, por reírse conmigo, por mandarme tantos mensajes y por haber visto alguna serie o peli que les recomendé. ¡Gracias por estar ahí a todos los hermosos oyentes que me llevo en el corazón! Y a mi equipo por 3 años, gracias por aprendizaje enorme", dijo.
Cómo llegó Dalma Maradona a radio Metro
En el extenso mensaje que dejó en su cuenta de Instagram, Dalma se refirió a cómo llegó al programa con Nicolás Cayetano y Diego Schultz entre otros.
"Cayetano me llamo para hacer radio en el peor momento de mi vida después de lo de mi papá y mis palabras fueron: 'Yo estoy en el fondo del mar, no tengo nada para darte ni a vos ni a los oyentes'. Y el me dijo: 'Vení igual'", relató Dalma asegurando que pese a que dijo que no, luego lo pensó mejor y para salir del "agujero horrible" en el que estaba, aceptó la propuesta.
"Y a partir de ahí fue todo hermoso", recordó la actriz. "Gracias a todos por dejarme jugar. Gracias por enseñarme a hacer radio! Los quiero mucho y siempre que los escuché va a ser un día perfecto", cerró.