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Colores más música, mimos de mamá, ocurrencias de hijos con ADN de artistas… Todo vale para crear, para expresarse, para “vibrar” en familia. Karina El Azem (49) juega con sus locas pinceladas, mientras Lorenzo (10) toca el saxo y Esmeralda (8) improvisa en teclados. Son los hijos que la artista plástica comparte con Roberto Pettinato (63), de quien se separó tras siete años de matrimonio. “Tengo formación de pintora aunque incursiono en la impresión digital y técnicas más modernas. Combino lo clásico con las últimas tecnologías. Ahora estrené un nuevo taller. Es como una fábrica abandonada que se empezó a ocupar por músicos. Se hizo bastante conocido cuando Spinetta (Luis Alberto) grabó allí sus últimos videos—afirma la artista que ahora prepara obras para exponer en la próxima Bienal de Curitiba (Brasil); que viene de realizar la muestra “Amor Infiniti” (pulsión por llenar el vacío que tienen los artistas abstractos según Ernest Gombrich); que está abocada en el Proyecto Arte para Ciegos Fundación Ninawa Daher; y trabaja para la segunda temporada del programa “La Marca Original: Arte Argentino” por la TV Pública (ganador del Premios Fund TV 2019)—. Mi trabajo es postconceptual: a veces figurativo, otras abstracto. Los materiales que uso tienen que ver con las ideas que quiero representar. En mis últimas piezas volví a la pintura, aunque incorporada al trabajo digital. Construyo objetos con balas usadas, perlas y mostacillas, los fotografío y completo mis obras usando photoshop. Estudio tanto las imágenes ancestrales y arquetípicas, como el arte abstracto contemporáneo. Me interesa la tradición ornamental y la psicología de la percepción, pero también el comportamiento humano y la física”, agrega quien es Egresada de la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón; y cuyas obras forman parte de numerosas colecciones Privadas y Públicas como el Museo Nacional de Bellas Artes, Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, Colección Fortabat, Re-Colección MalBA, Fundación Konex, Art/Omi, New York, Centro Cultural Sao Paulo, entre otros.
Sus hijos, dignos herederos del histrionismo artístico de mamá Karina y papá Roberto, no dejan de enchastrarse las manos con pintura en el marco de la divertida producción de CARAS. “Tener hijos es una revolución total. Todo para bien, me dan más ganas de todo. Esta es mi gran vocación, siempre me imaginé artista y madre de dos hijos. Ni más ni menos: dos hijos. Mi actualidad está muy acorde a lo que yo soñaba —comenta mientras Lorenzo toca el saxo, como si fuera ‘una miniatura de Roberto Pettinato’—. Lorenzo toca hace años pero no todo el tiempo. El instrumento se lo regaló el padre y le enseñó a tocarlo. Es un chico que escucha muy buena música, le gusta el jazz, es fan de John Coltrane. Es como que tiene una cruzada en contra de la ‘música horrible’. En el colegio le da bronca que sus compañeritos escuchen reggaetón u otras cosas ‘tan elementales’ (Risas). También le gusta mucho Charly García, Sumo, Spinetta… ¡el nene promete! (Más Risas). La música la lleva en la sangre”, agrega.
Cuando se refiere a Esmeralda, también hace alusión a su inclinación por el arte. “Ella pinta mucho. Se expresa con pinturas y maquetas en tres dimensiones. Guardo todo lo que hace, son cantidades enormes de cosas (Risas). Escribe libros de cuentos y los ilustra. No es algo que yo le haya inculcado, lo trae con ella. Mis dos hijos son absolutamente libres. Pasamos mucho tiempo juntos, compartimos el humor absurdo. En casa hay mucho disparate, mucha cosa histriónica. Igualmente son niños, no son Nerds. Ojo que Lorenzo también juega mucho al fútbol, Y Esmeralda patina, van mucho al club. Disfrutan de su infancia y son ‘cero agrandaditos’—explica El Azem, que reconoce que hay un tema que le incomoda hablar: su separación con Pettinato—. Fue hace cinco años, paso rápido. Soy súper reservada para hablar de mis cosas, y por eso en esa época sufrí horrores la exposición mediática. Me terminó pasando precisamente eso que tenía que aprender a trascender. Hoy no estoy en pareja, y tengo ‘cero obsesión’ con eso. Una de las cosas que explicaría por qué no tengo novio es que soy muy disciplinada con el arte y trabajo muchas horas por día”, afirma. Y para rematar la nota, confiesa: “En el carácter, ‘Lore’ también tiene cosas parecidas a mí y ‘Esme’ a Roberto. Y quizás al revés en lo artístico. Gracias a Dios, mis hijos son claramente una versión muy mejorada de sus padres (Risas)”, concluye.
Productora: Alicia Blanco
Fotógrafo: Marcelo Dubini
Agradecimientos: Zapatos Manaia. Las Oreiro. Remeras Estrella Art. Peinó: Federico Hecht. Maquilló: Christina Maidana para @oscarmuletok. Locación: Polo Cultural Saldías.
