Ama Maitea llevó los sabores del Valle al corazón del Gran Mercado Argentino

Con una propuesta basada en chutneys patagónicos elaborados con frutas agroecológicas del Valle Inferior del Río Chubut, la marca fue parte del stand colectivo de Origen Chubut, sello de distinción que reunió a 22 productores de la provincia.

Durante cuatro jornadas, más de 500 emprendedores y pymes de toda la Argentina compartieron sus productos en un espacio de intercambio, degustación y celebración de los sabores locales. Ama Maitea —fundada por Maite Caracotche en Gaiman, Chubut— se destacó por su propuesta auténtica, con salsas agridulces que combinan tradición, creatividad y materias primas nobles del sur.

“Fueron días llenos de aprendizaje, momentos inolvidables y mucha conexión. Nos divertimos, conocimos personas hermosas, compartimos saberes, descubrimos sabores únicos y, por supuesto, hicimos que muchas personas probaran nuestras salsas agridulces”, cuenta Maite, quien atendió personalmente el stand junto a su hija Emma y una prima.

El stand de Ama Maitea fue punto de encuentro para visitantes de todo el país y del exterior, lo que permitió amplificar su propuesta ante un público diverso. Uno de los momentos más celebrados de la feria fueron los maridajes espontáneos con los productores de quesos y fiambres de Córdoba, ubicados justo enfrente. Así nacieron combinaciones como lomito de cerdo con chutney de ciruelas, y un éxito rotundo entre los presentes: queso azul con chutney de tomates cherry Ama Maitea.

Además de visibilizar los sabores del sur patagónico, la experiencia abrió nuevas oportunidades comerciales. La marca se encuentra sumando puntos de venta en Buenos Aires y otras ciudades del país, al tiempo que crecen las ventas a través de su tienda online (amamaitea.ar). En Instagram, donde comparte recetas, historia y actualidad del proyecto, se la puede seguir como @amamaitea.

El nombre Ama Maitea, que en euskera significa “mamá querida”, es un homenaje a la madre de Maite, y refleja el espíritu que impulsa el emprendimiento: el amor por los orígenes, la conexión con la tierra y la voluntad de compartir sabores que cuentan una historia. Con cada frasco, Ama Maitea lleva un pedacito del Valle a la mesa, con identidad, pasión y memoria.

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