Wenceslao Moreno, el joven que llegó a ser cinturón negro de taekwondo teniendo parálisis cerebral

En una nueva entrega de +Caras, el ciclo de entrevistas conducido por Héctor Maugeri en Caras TV, Wenceslao “Wenchy” Moreno compartió su extraordinaria historia de vida. Médico, apasionado por la montaña y cinturón negro de taekwondo, Wenchy convive desde su nacimiento con parálisis cerebral. Sin embargo, su condición nunca fue un límite para perseguir sus sueños.

A los 29 años, se desempeña como profesional de la salud, está en plena formación como neurólogo clínico y, en lo personal, construyó una vida llena de amor y proyectos junto a su esposa Pilar. Durante la entrevista, también recordó con emoción a su abuelo José, quien le transmitió el amor por la montaña y, antes de irse, le dejó una enseñanza que lo marcó para toda la vida.

“Mi abuelo José fue el que me llevó a la montaña por primera vez, cuando tenía nueve años. Él escaló dos veces el Aconcagua. Me inculcó el desafío de la montaña que yo lo llevé a la vida”, expresó conmovido.

Acto seguido, compartió: “Para llegar a la cumbre hay un camino. Durante el camino hay cambios, algunos imprevistos por el clima porque cae una piedra. Cuando llegás a la cumbre, ese momento buscado, te das cuenta que tenés que bajar. En la vida pasa lo mismo. Hay subidas y bajadas”.

Wenceslao Moreno y el camino para ser cinturon negro de teakwondo

Otro de los desafíos que lo define es haber alcanzado el cinturón negro de taekwondo, entrenando en igualdad de condiciones, sin recibir tratos especiales. “Lo hablé con mi entrenador. Él no tenía experiencia en entrenar con casos como el mío y yo tampoco estaba metido en el tema”, explicó.

“El taekwondo exige muchísima disciplina, flexibilidad, coordinación, musculatura… no tenía nada de eso”, reconoció. Pero el desafío fue más fuerte. “Era buscarle la vuelta y el desafío de decir: ‘probemos’. Y mi sueño era ser cinturón negro. Tampoco quería que me traten distinto. Eso hace que uno se esfuerce más”.

Con determinación, entrega y una visión clara sobre sus objetivos, Wenceslao Moreno desafió los límites de la parálisis cerebral: es médico, se forma como neurólogo, escala montañas y es cinturón negro de taekwondo. De esta forma, sigue demostrando que su diagnóstico nunca fue un límite para perseguir sus sueños.