Es sabido que Antonio Gasalla no tiene pelos en la lengua y nada lo hace callar. Dispuesto a contestar todo lo que se le pregunta, dialogó con Marcelo Polino en el programa "Polino auténtico" y no dejó títere con cabeza.
El humorista, primero, se refirió a la situación actual del país y cómo lo perjudica el confinamiento. "Tengo un masajista desde hace años y no puede venir por la cuarentena", dijo ofuscado y agregó: "La salud tenés que metértela en el culo".
En otro segmento de la charla, dijo que "mientras tengamos a este presidente y dos personas más que hoy manejan el país, para que alguien arregle, esto hay que hacer fuerza", y muy filoso concluyó al respecto: "Hasta hace unos días, el primer mandatario estaba muerto de risa y cuando se dio cuenta de la realidad, se empezó a deprimir", pero aclaró poniendo paños fríos: "Lo digo con todo respeto. Hay que ser presidente de esta país tan lindo", dijo irónico.
Por otra parte, también habló de la fallida temporada pasada en la que, con la producción de Guillermo Marín, llevaba a cabo una exitosa comedia en Mar del Plata pero, repentinamente se bajó del escenario "Me bajé por cuestiones personales, pero también por un destrato por parte de los productores de la obra", refiriéndose a Guillermo Marín.
En diálogo con Caras, el productor, sin embargo manifestó que la relación con Gasalla era óptima: "El y su abogado, Alberto Pierri, se comportaron como dos caballeros porque cuando él decidió irse antes, yo le dije lo que había perdido y él me dijo que parte de eso me lo iba a devolver, y así fue. Cuando llegué a Buenos Aires me lo devolvió en efectivo" sostuvo Marín y continuó con su relato: "Se portó un fenómeno. Lo que puedo hablar de Antonio Gasalla y de su abogado son maravillas. Lo que me devolvió fue lo que había cobrado por haber actuado, con lo cual actuó gratis en el verano, o sea. un señor de verdad".