martes 23 de abril del 2024

Claudia Gonzaléz De Vicenzo: conexión cuántica

"La mujer tiene la potencia y la fuerza para contener y sostener situaciones y procesos. Y lo demuestra en lo cotidiano."

¿Qué la volcó al emprendedurismo?

Me esfuerzo en todos los ámbitos de mi vida para no depender de nada ni de nadie, sino para compartir e interrelacionarme con todos y con todo, incluyendo a la Naturaleza en todos sus niveles.Si tengo que decir qué me volcó a ser yo misma, mi voluntad, pero también la vida. Y la exclusión del sistema. Un sistema que te necesita dependiente.

¿Qué diferencial aporta una mujer a la hora de liderar un emprendimiento?

No creo en la diferencia de valor entre la mujer y el hombre. Pero sí sostengo la diferencia de potenciales. La mujer tiene la potencia y la fuerza para contener y sostener situaciones y procesos. Y lo demuestra en lo cotidiano. La casa, el trabajo, los hijos.  Hay un diferencial en ser mujer, pero hay uno también en ser hombre. No los veo como compitiendo sino como complemento. Para ello hay que poder asumir el SER. Ser-se a sí mismo.

¿Cuál fue su mayor caso de éxito?

Siento la vida como un fluir. Salir del mundo de las empresas sucedió casi como destino. Descubrí a una mujer norteamericana que realizaba regresiones a vidas pasadas. Viajé a una experiencia con ella y, cuando volví, mis asesoramientos a empresas fueron desestimados. Ese fue el más grande éxito de mi carrera. Me obligó a salir de la zona de confort y revisar lo que quiero ser y lo que quiero hacer. Ahí me convertí en Yo Misma y, desde ese lugar, acompaño en Latinoamérica y España en procesos personales y grupales de volverse la mejor versión de uno mismo.

¿Cuál fue el fracaso del que más aprendió?

No creo en los fracasos. La vida se presenta como experiencia. En todos los acontecimientos encuentro enseñanzas individuales que me empujan a revisarme para moverme al siguiente nivel de mí misma.

¿Cuánto pesa la comunicación en su plan de negocios?

Ya no hago planes de negocios. Me concentro en el aquí y en el ahora permitiendo que la vida fluya. Y me ocupo de no interrumpir ese fluir con pensamientos, emociones, acciones o palabras que lo disminuyan.La comunicación es la base de ese fluir. 

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