En esta nueva etapa, vestirse es mucho más que una cuestión de tendencias: es una forma de afirmarse, de recuperar espacio, de mirar al cuerpo no como problema sino como posibilidad.
UN LENGUAJE QUE SE REINVENTA
La moda ya no es sinónimo de rigidez. Hoy, las pasarelas y campañas muestran siluetas que hasta hace poco eran invisibles: cuerpos grandes, pieles sin editar, arrugas, cicatrices, corporalidades disidentes. Hay algo profundamente político en esa decisión de mostrarse tal cual uno es. Porque cada cuerpo que se ve, habilita a otros a sentirse posibles.
Detrás de esta transformación hay una generación que creció cuestionando los mandatos de belleza. Son consumidores que piden más autenticidad y menos perfección. Que buscan sentirse identificados. Y que entienden que la moda no debe incomodar, sino acompañar.
CUERPO, TECNOLOGIA Y FILTROS: UNA MIRADA CRITICA
En medio de esta revolución aparece una paradoja: mientras promovemos la aceptación real, las redes siguen plagadas de filtros que suavizan la piel, afinan rasgos, borran la diferencia. La tecnología genera nuevos dilemas: ¿qué es real cuando todo se puede modificar?
La inteligencia artificial incluso permite probar prendas sobre cuerpos virtuales que se alejan de cualquier referencia humana. Es un recurso innovador, sí, pero también una advertencia: que la inclusión no se convierta en una estética más, sino en una práctica ética y coherente.
VESTIRNOS COMO ACTO DE CUIDADO
Más allá del discurso, la moda del 2025 empieza a traducirse en decisiones concretas: prendas cómodas, sin género, que abrazan y no oprimen. Diseños pensados para acompañar el movimiento, la salud, la vida cotidiana.
El cuerpo vuelve a estar en el centro, pero no para ser corregido, sino para ser escuchado. Para muchas personas, encontrar ropa que les calce bien es encontrar también un lugar en el mundo.
UNA NUEVA BELLEZA POSIBLE
Quizás la verdadera tendencia de este tiempo no se trate de colores ni de cortes, sino de una mirada distinta sobre nosotras mismas. Porque cuando la moda deja de imponerse y empieza a incluir, algo profundo se transforma: el cuerpo ya no es un objeto para ser juzgado, sino una historia para ser contada.
Contacto
Sofia Iachini
Redes: @sofia.iachini Instagram y tik tok
Celular: 3413241453
Mail: [email protected]

Polémica en Saavedra: cierran centro de jubilados por usurpación

¿Cómo mantener tu piel maquillada y a la vez hidratada?

Así fue el casamiento de Gimena Accardi y Nico Vázquez: del look de la China Suárez y Lali Espósito al emotivo “Sí, quiero”
