Tenemos ideas sobre poner puntos finales en la vida, preferimos poner puntos suspensivos para dejar la puerta abierta para ver qué pasará mañana o el año que viene o después de… ¿Después?
Seguimos alimentando la idea que hay un después, que hay esperanzas… Una vez alguien me dijo: ¿sabes cuál es el peor estado de ánimo? Estar esperanzado, porque te hace creer que tenes que esperar y te hace quedarte congelado en la idea de que puede suceder eso que no está sucediendo en este momento, perdés poder.
Siempre reflexioné sobre esas palabras y sentí rechazo y también conexión.
Empecé a comprender más aquellos finales que vivimos los humanos.
Algunos son finales esperados, otros no. A veces, nos envuelven en caos, a veces, en paz, en esa extraña sensación de gritar: ¡gracias que ya no tengo que sostener esto!
Lo que considero maravilloso es poder tomar distancia para mirar el final como la oportunidad de saltar hacia lo desconocido, quizás, era lo que inconscientemente veníamos pidiendo y... ¡walá! Aquí estamos, abrazando lo nuevo, observando la destrucción que puede dejar un final inesperado, pero asumiendo que todo se ordena porque en cada momento de la existencia, estamos siendo amados. Cada situación está allí para quitarle el filtro a mi visión sobre mí.
Si has pasado por caída de velos, por la muerte de ilusiones, por los cambios forzosos, fue para ¡volverte REAL! ¿Tenías miedo a perder y perdiste? ¡Un miedo menos!
En el camino aprendes que se puede, que hay salidas curativas, que hay otras formas de ver la herida, que podes crear tu propio ritmo, tu propia forma de vivir. Vas quitándote condicionamientos que te alejan del enorme amor que sos, de todo lo que sos capaz, de la luz que emanas, del poder de tu corazón!
Alimentá con pensamientos el sentirte suficiente, el sentirte más, el sentirte útil. Hay más poder en tu mente y en tu corazón del que podes concebir en este momento. ¡Entrenate para verlo!
Que este año que inicia para vos, seas valiente para amarte como jamás lo has hecho y para amar la vida que te agradece continuamente, tu existir.
Nadia Herencia
@nadiaherencia
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