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Catherine Fulop regresó a las cocinas de MasterChef Celebrity y lo hizo con todo. De hecho ayer ganó la medalla de plata por unas cookies que le quedaron deliciosas.
Su deseo de ser abuela
Mientras preparaba las galletitas para el desafío de la noche, se acercó Santiago del Moro a su cocina. Lo primero que le preguntó a Catherine Fulop fue si se las hacía a sus hijas cuando eran chiquitas. "Jamás", respondió la actriz entre risas. Seguido a esto, el conductor le consultó si le gustaría cocinarle a sus nietos. "¡Me encantaría!", dijo enseguida la mamá de Oriana y Tiziana Sabatini, y agregó: "Estoy aprendiendo para eso". Luego, en un insert, Catherine Fulop contó: "Les voy a hacer todo esto. Gracias MasterChef".
Por último, la actriz le comentó a Santiago del Moro: "Necesito un alegrón en esta etapa de mi vida. Siento que eso va a ser un alegrón" Y en un nuevo insert sumó: "Abuela activa".
El difícil momento de Catherine Fulop, víctima de extorsión
En diciembre fueron horas difíciles las que le tocaron atravesar a Catherine Fulop al ser víctima del hackeo de su cuenta oficial de Twitter, donde los hackers se tomaron el atrevimiento de, haciéndose pasar por la modelo, simular una colecta, donde pedían colaboraciones económicas, con el objetivo de ayudar a que muchos niños puedan celebrar la Navidad de la mejor manera.
En dicho tweet, los hackers habían publicado una cuenta falsa, donde se adueñaban de todas las donaciones de los seguidores de Catherine Fulop. Pero eso no fue todo, ya que, al notar dicho acontecimiento, la modelo quiso recuperar sus datos y para eso contrató una empresa de seguridad cibernética. Eso enfureció a los hackers.
Desde diferentes líneas telefónicas se comunicaron directamente con la actriz para pedirle los códigos de confirmación que estaban generando los empleados de la empresa y hasta le dieron los nombres de los mismos. La modelo asegura que eso le daba miedo, porque no podía creer el alcance de esta gente.
Lo cierto es que eso no fue todo, sino que lo más grave fue la extorsión a la que fue sometida Catherine Fulop, quien confesó que los hackers le pedían 900 dólares para devolverle las cuentas de Twitter e Instagram, de las que hace una autocrítica reconociendo que tenía claves “pavas”.
Afortunadamente, Catherine Fulop pudo recuperar sus cuentas y el mal momento que vivió, le sirvió para prestarle más atención a la seguridad que genera a la hora de crear una clave y la importancia de no repetirlas en diferentes cuentas.
