Mientras el foco mediático suele estar sobre los miembros más visibles del Principado de Mónaco, hay una nueva generación que empieza a despertar la curiosidad del público. Uno de ellos es Balthazar Rassam, el hijo menor de Carlota Casiraghi y del productor de cine francés Dimitri Rassam.
De bajo perfil pero cada vez más presente en las imágenes que circulan de su familia, el pequeño ya deja entrever el legado de elegancia y estilo que heredó de una de las casas reales más admiradas de Europa.
La vida de Carlota Casiraghi y su familia alejada de la mirada pública
Carlota Casiraghi, hija de la princesa Carolina de Mónaco, sabe cómo mantener su vida privada lejos de los medios. Escritora y referente de la moda, la royal combina a la perfección su herencia aristocrática con una vida intelectual que la distingue del resto de los royals europeos.
Junto a Dimitri Rassam, hijo de la legendaria actriz Carole Bouquet, formó una familia con dos mundos potentes: el del cine francés y el de la realeza monegasca. De esa unión nació Balthazar, quien desde su llegada al mundo es uno de los niños más esperados y protegidos del entorno de Mónaco.
A diferencia de su hermano mayor, Raphaël, fruto de la relación de Carlota con el humorista francés Gad Elmaleh, Balthazar se mantiene en un perfil mucho más reservado. Mientras que Raphaël fue visto acompañando a su mamá en eventos públicos y hasta en producciones fotográficas, Balthazar rara vez aparece ante las cámaras. Esta decisión responde al deseo de sus padres de preservar su infancia y ofrecerle un entorno lo más normal posible, dentro del contexto excepcional en el que nació.
Carlota y Dimitri eligieron criar a su hijo entre Francia y Mónaco, combinando la vida cultural de París con la tranquilidad del principado. Según fuentes cercanas, el pequeño ya muestra una gran sensibilidad artística, lo que alimenta las expectativas sobre el camino que pueda tomar en el futuro.
Balthazar Rassam ya se perfila como una figura interesante dentro del linaje Grimaldi. Sin títulos nobiliarios directos (ya que Carlota no ocupa un lugar formal en la línea de sucesión), su presencia es sin embargo significativa dentro de la familia. Su vida, como la de tantos herederos contemporáneos, transita entre la tradición y los nuevos tiempos.
VO

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Balthazar Rassam: así es el hijo menor de Charlotte Casiraghi
