Charlene de Mónaco y Letizia Ortiz parecen no tener buena relación y los motivos de esta distancia son un verdadero enigma entre los amantes de la realeza.
Charlene es apodada por muchos medios europeos como la “princesa triste" y su imagen seria y distante no solo alimentó rumores sobre su incomodidad en la realeza, sino que le dio la fama de no tener facilidad para las amistades.
A diferencia de otras royals que suelen mostrarse cercanas entre sí y forjar vínculos diplomáticos o incluso amistosos, entre Charlene y Letizia nunca hubo química.
Por qué Letizia Ortiz y Charlene de Mónaco "no tienen onda"
La distancia entre ambas empezó a notarse hace tiempo, pero se volvió más evidente en octubre de 2022, cuando el príncipe Alberto visitó Madrid en el marco de un encuentro oficial con los Reyes de España. En esa ocasión, Charlene decidió no aparecer en los eventos protocolares, lo que fue interpretado por los analistas como una falta de respeto hacia la monarquía española.
Más tarde, en una audiencia en el Vaticano, el malestar quedó todavía más expuesto. Según contó el experto en casas reales Cristian Salomoni a Vanitatis, Letizia fue quien dio el primer paso para saludar a Charlene, pero la princesa monegasca apenas reaccionó. Se mostró tensa, fría y distante, dejando claro que el saludo era pura formalidad.

Algunas fuentes cercanas aseguran que la relación entre ambas está atravesada por un desprecio mutuo. Se dice que Charlene no habla nada bien de Letizia en privado y que hasta la subestima. Por su parte, la reina española habría optado por evitarla directamente y no forzar ningún tipo de vínculo.

El detalle que más llamó la atención en redes es que la cuenta oficial de Instagram de la Casa Real Española sigue a casi todas las casas reales del continente, menos al Palacio Principesco de Mónaco. Un gesto chico, sí, pero que suma puntos a esta historia de frialdad protocolar.

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