Rodolfo Castañares Pose es el padre de Nacho, uno de los participantes más queridos dentro y fuera de la casa de Gran Hermano.
Hace una semana ingresaron familiares de los jugadores a la casa más famosa del mundo y uno de ellos fue el padre de Nachito. Lo cierto es que esta dupla se transformó en una de las más elogiadas por los televidentes. En efecto, el hombre se ganó el corazón de los televidentes con su acento español, su simpatía y el entrañable vínculo que mantiene con su hijo.
Rodolfo habló de su sexualidad dentro de la casa de Gran Hermano y reveló cómo se lo contó a su hijo
Rodolfo Castañares Pose es el papá de Nacho, uno de los favoritos dentro de la casa de Gran Hermano. Lo cierto es que este hombre se suele presentar como "Rodolfo Pose" y es personal coach. Si bien es uruguayo, pasó gran parte de su vida con su marido en Sitges, España, por lo cual, habla como si fuera español.
El pasado domingo por la tarde, mientras los participantes de Gran Hermano tomaban mates en la cocina, Rodolfo comenzó a hablar de cómo era su familia y de cómo fue el proceso de contarle a su hijo sobre su sexualidad. “Yo me sentía muy culpable porque nuestra familia era preciosa, pero me enamoré de otra persona. Fácil estuve como 15 días diciendo ‘¿Cómo se lo digo?’ Y un día me senté con ella y le dije ‘tengo que contarte algo’”.
De esta forma, le reveló que había comenzado a sentir cosas por un hombre y sostiene que en ese momento, ambos estaban “alejados” y su mujer tenía intenciones de volver a Argentina. “Se quedó como shockeada...yo sentí mucha culpa en eso. Luego, lo superé por suerte y fui al psicólogo”.
También recordó los momentos en que su hijo dio a conocer su sexualidad. “En el fútbol, de repente lo iba a buscar yo y al día siguiente iba Jesús (su novio)”, expresó y añadió que ante las preguntas de quién eran ambos, Nacho contestó que eran sus papás y los compañeros reaccionaron de la mejor manera.
Por último, Rodolfo Castañares Pose, el nuevo jugador de Gran Hermano, recordó un episodio que vivió su hijo y que lo llenó de orgullo.
Resulta ser que un buen día, Nachito le dijo: “‘Tengo que contarte algo, le conté a Franco (el mejor amigo)’, ‘Ah, ¿y qué tal, bien?’, ‘Sí, super bien y si no quiere saber nada..’, como diciendo que si no estaba bien, pues ya está”.
CS.