El teléfono sonaba con insistencia pero nadie lo contestaba. Aturdida por él bajó las escaleras lo más rápido que pudo hasta la cocina y respondió. Del otro lado una voz familiar la paralizó. Era su ex que la llamaba para decirle que, por fin, podría encontrarse con el mayor de sus hijos, del que se había separado luego de abandonar el hogar familiar en busca de paz tras años de violencia a manos de su esposo.
Lee también Las diferentes hipótesis sobre la desaparición de Marcela Basteri, la mamá de Luis Miguel
Desesperada pidió hablar con el niño pero él le dijo que sólo lo haría si viajaba a Madrid en un par de días. Sin dudarlo compró el primer pasaje que consiguió de Italia a España, armó su valija y partió. Llena de ansiedad ante el inminente reencuentro, Marcela Basteri tomó el vuelo con destino al que sería el último lugar en el que se la vio.
Desde aquel día nadie supo nada más de ella, lo que significó un gran desafío para la actriz Anna Favella (34), que tras años de misterio, la regresó a la vida de una forma tan auténtica que hasta el propio hijo de Basteri, Luis Miguel (48), confesó que no pudo contener las lágrimas al verla interpretando a su madre en la serie de Netflix y Telemundo, que llegó a su fin el domingo 15 de julio.
Lee también La relación oculta de Diego Boneta y la hija de Luis Miguel
“Quise que Luis Miguel viera en mi el amor de su madre. Mi idea no fue nunca que me vieran como un reemplazo; sé que es un tema muy delicado para él. Como actriz mi trabajo fue contar quién era Marcela. Fue un personaje muy fuerte, un desafío… Espero que mi trabajo le haya gustado y que le haya regalado sonrisas y alguna que otra lágrima, como cuando uno ve una foto vieja de algún ser querido”, confiesa.
Para darle vida a Basteri, Anna pasó por un riguroso casting. Convocada por su gran parecido físico y sus raíces, la italiana no era fan del “Sol de México” y desconocía gran parte de su repertorio. Con un personaje con más misterios que certezas, la actriz recurrió a las emociones para moldear a Marcela.“La única manera que tenía para interpretar este personaje era darle alma. Me aferré mucho a su faceta como mamá para captar su esencia. Era una mujer llena de luz, muy dulce y maternal. Estaba llena de ternura y amaba a sus hijos”, dice.
Junto al español Oscar Jaenada (43), Luis Rey en la ficción, Favella formó una potente dupla que supo traspasar la pantalla.“Era importante transmitirle al público la relación de Luis y Marcela, y cómo fue cambiando con el tiempo. Oscar es un gran artista y nos divertimos mucho en el set, aunque las escenas eran muy fuertes. Intentábamos bromear entre nosotros para que el set no se cargara de toda esa violencia que había entre nuestros personajes”, asegura.
Instalada en México durante los cinco meses de rodaje, Anna pasaba los días entre filmaciones viejas, recuerdos y anécdotas, que la nutrieron y ayudaron a que su Marcela fuera lo más parecido a la realidad. Si bien sus escenas eran desgarradoras, hubo una que la llenó de paz. “Me emocionó filmar junto a Luis de la Rosa (Luis Miguel en la adolescencia) la parte en la que le canta a su madre sobre el escenario del Luna Park. Era un momento muy particular de su vida, porque estaba a punto de separarse de Luis Rey y temía perder a su hijo. Antes de grabarla vimos vídeos de ese momento varias veces para que la escena fuera lo más parecida a la realidad posible”, recuerda.
Lee también Exclusivo: Luisito Rey, el padre de Luis Miguel en la serie
Agradecida por la recepción que tuvo la serie entre el público latinoamericano, confiesa que hoy siente mucho respeto por la figura del popular artista mexicano, a quien conoció en pleno rodaje.“Conocí a Luis Miguel en medio de la filmación, después de uno de sus conciertos en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México. Fui con el director a ver el show y fue emocionante el encuentro cara a cara con él. Al saludarlo fue como estar frente a un familiar. Lo sentí muy cercano. Fue impactante”, revela.
De regreso en Italia y ansiosa por comenzar a rodar la segunda parte de la ficción, de la que se desconocen los detalles, asegura que Marcela Basteri fue el rol de su vida.“Las emociones con las que más trabajé estaban todas relacionadas con el amor. Fue una mujer que sufrió mucho y luchó para proteger a sus hijos y volver a reencontrarse con ‘Micky’, como lo llamaba a Luis Miguel. Marcela me enseñó que luchar por lo que uno ama vale siempre la pena”, concluye.
por Delfina Ortega Nodar
Fotos: Gentileza Netflix.