Así está hoy Romeo, el hijo de Flor Bertotti y Guido Kaczka de 16 años

En el mundo del espectáculo argentino, Florencia Bertotti y Guido Kaczka son dos figuras muy queridas, reconocidas tanto por sus éxitos profesionales como por la relación sentimental que compartieron en el pasado, de la cual nació su hijo Romeo. Recientemente, el joven cumplió 16 años, y su notable crecimiento físico y personal sorprendió a todos, a través de las imágenes que su madre compartió en Instagram.

Una vida lejos de los reflectores

A pesar de la fama de la destacada actriz y el popular conductor, ambos siempre hicieron un gran esfuerzo por mantener su vida privada, especialmente la de su hijo Romeo, al margen de los medios. Nacido el 10 de julio de 2008, Romeo ha crecido en un ambiente alejado de los flashes, gracias al cuidado de sus padres.

Aunque son contadas las veces en que muestran imágenes de él, la actriz que está en pareja con Federico Amador aprovechó el último cumpleaños de Romeo para dedicarle un sentido mensaje, compartiendo además una tierna foto en blanco y negro donde se la ve besándolo en la mejilla.

"¡Feliz cumple mi vida entera! Sos mi orgullo máximo y todavía no puedo creer mi suerte", escribió la actriz, famosa por su papel en Floricienta. "Seguí leyéndome en voz alta, explicándome matemática avanzada y filosofando conmigo. Felices 16, Rome de mi vida. Si supieras cuánto te amo, te asustarías".

El emotivo mensaje de Bertotti acumuló miles de likes y generó una ola de comentarios cariñosos y sorprendidos por parte de sus seguidores, quienes no podían creer cuánto había crecido el primogénito de la actriz y el conductor de "Los 8 escalones".

Con 16 años, Romeo ya rivaliza en altura con su padre y muestra un gran interés por áreas como la matemática y la filosofía, según lo reveló su madre en el posteo.

A pesar de esta excepción, en la que decidieron mostrar una parte de la vida de Romeo, Florencia Bertotti y Guido Kaczka continúan optando por mantenerlo fuera del ojo público. Tras el festejo y la publicación, la familia ha vuelto a su discreta rutina, preservando la privacidad del joven.